E. M.
El agua de la fuente de La Piquera, en la parroquia de Jove, ya no se puede beber. Lo indica un cartel que advierte de su falta de potabilidad que fue colocado por operarios de la Empresa Municipal de Aguas (EMA) la semana pasada, un anuncio que ha causado extrañeza y preocupación a los vecinos de la zona, acostumbrados a saciar su sed gracias al caño de la fuente, que ha sido retirado y sustituido por un nuevo grifo que conecta con la traída de aguas y del que sí se puede beber. Por eso, piden explicaciones para conocer los motivos de esta medida.
«Supongo que habrán hecho los análisis necesarios antes de tomar esta decisión, pero queremos saber por qué antes podíamos beber y ahora no», asegura Enrique Fernández, presidente de la Asociación de Vecinos «La Campa de Jove». Por el momento, no ha obtenido respuesta por parte de los responsables municipales. «Desde hace siglos la gente utiliza la fuente para muchas cosas, entre ellas, para beber», señala. Ahora el recinto sólo podrá ser utilizado como lavadero. «Sólo podemos beber del grifo que han instalado y que conecta con la traída general de aguas, pero antes lo hacíamos del agua de la propia fuente», asegura Fernández.
La Piquera es una de las siete fuentes con las que cuenta la parroquia de Jove. «Mucha gente ha llenado recipientes con esa agua desde siempre», señalan en la parroquia, confusa por la nueva situación. Este periódico intentó ayer sin éxito ponerse en contacto con la concejala de Medio Ambiente, Dulce Gallego, para conocer las razones de la medida.
