C. JIMÉNEZ
Ni es un abandono ni una salida por la puerta de atrás. La dimisión del director de la Escuela de Ingeniería Técnica Industrial de Gijón, Joaquín Mateos, se hará oficial hoy mismo con la entrega del documento de renuncia en el Registro de la Universidad y la comunicación a la Junta de Escuela de tal decisión. Frente a las voces que los últimos días le acusaban de ser «el capitán que abandona el barco en plena tormenta», Mateos justificaba así su marcha: «Con la dimisión estoy defendiendo mi dignidad como director y la de mi Escuela que tiene 122 años de historia».
La lectura de un manifiesto ante la Junta de Escuela pondrá fin hoy mismo a sus últimos seis años como máximo responsable del centro. «No admito debate, ya no hay vuelta atrás», recalca ante la posibilidad de que el órgano asambleario le pidiera continuar, al menos, hasta la constitución del gobierno provisional que dirigirá el rumbo de la nueva Escuela Politécnica de Gijón surgida de la unificación de la Escuela de Ingeniería Técnica Industrial, la Escuela de Ingeniería Técnica Informática y la Escuela Politécnica Superior de Ingeniería.
La renuncia de Joaquín Mateos también incluye el cese de los dos subdirectores, Mariano Mateos Alberdi y Javier Suárez Quirós, nombrados por el rector a propuesta del director del centro. Ninguno de los miembros del equipo directivo está por la labor de colaborar en el proceso de reorganización de las escuelas de Ingeniería, que ha sido muy contestado desde la Escuela de Peritos y también desde la vecina Escuela de Informática. «No quiere ser cómplice de eso proceso ni que figure mi nombre ahí», dice el todavía director para tratar de justificar la anticipación de su renuncia, que llega un mes antes de la creación del nuevo centro, surgido de la unificación de los tres anteriores. «Es una chapuza cómo se está haciendo», sostiene Mateos. Desde el Rectorado aluden a razones de tipo económico y a la optimización de los recursos humanos y materiales para avalar estos cambios que, en todo caso, vienen dados por la adaptación al Espacio Europeo de la Educación Superior (EEES).
Costes
El Rectorado estima que la creación del nuevo centro tendrá unos costes anuales de 155.000 euros. No obstante, el equipo de gobierno de la Universidad contempla que la eliminación de dos equipos directivos supondrá un ahorro de 70.000 euros.
Recursos
La futura Escuela Politécnica de Gijón suma hasta cuatro sedes distintas, incluyendo los laboratorios y recursos para prácticas con que contaban los tres centros a fusionar.
