El fin de semana pasado quedará señalado en el calendario como uno de los más fríos de los últimos años. Por ese motivo, los álbumes de fotos, ahora digitales, dejarán constancia de que el paisaje local se vistió de blanco impoluto debido a la nieve y el granizo, que incluso adornaron las playas de Poniente y San Lorenzo. De igual manera, la plaza Mayor deslumbró a los viandantes con los vestidos de las novias que dieron el «sí, consiento». Aunque en esta ocasión, más que temblar de emoción los contrayentes lo hicieron de frío, por las bajas temperaturas reinantes.

Una de las parejas protagonistas, la formada por la brasileña Daniele Soares Marcolino y el gijonés Jonathan Hermida Fernández, disfrutan ya del sol de Brasil, el país de la novia, olvidándose por unos días de los temporales. Fueron testigos de su enlace Keile Soares Marcolino y Aitor Díaz Suárez. La Carbayera de Granda se encargó de servir el banquete que siguió al enlace.

Diferente chef eligieron para su menú nupcial la palentina Almudena García Gutiérrez y el madrileño Raúl Serna Rodríguez. El hotel Trip Rey Pelayo los acogió a ellos, a sus invitados y a los testigos, María Antonia Gutiérrez y Mariano Serna. Desde que la pareja reside en Gijón por motivos de trabajo, no se ha planteado volver a sus ciudades de origen. «Nos encanta la ciudad», apostilla la novia, «por esa razón no dudamos en formalizar nuestra relación aquí».

Y desde El Pinal despiden página María Dolores Lorenzo Fernández y Óscar Suárez García. Vecinos de El Coto, que no desvelaron su destino de luna de miel. «Es una sorpresa», afirmaron ambos. María Esperanza García y Emilio Loredo actuaron de testigos.