María IGLESIAS

Cumple una década como «escaparate» y «foro de discusión» de las artes escénicas autonómicas y ya ha recibido su primer regalo de cumpleaños. La Asociación de Compañías Profesionales de Teatro y Danza de Asturias ha concedido el premio «Oh!» de honor a la revista «La Ratonera», por «ser la memoria escrita de las artes asturianas». La entrega del premio se hará hoy, durante la gala que la Asociación de Compañías Asturianas celebra en el Jovellanos (20.30 horas).

«Es un premio muy especial porque viene de compañeros profesionales y nos llega en un mal momento financiero, en el que necesitamos los máximos apoyos», dice el director-editor de la revista, Roberto Corte.

La publicación, que nació con el objetivo de presentar las novedades teatrales de la región, se ha consolidado con el tiempo, aunque sin perder de vista su fin. «Siempre hemos tenido la voluntad de compaginar el servicio público con un espíritu crítico y constructivo, objetivos que se han cubierto y se mantienen», añade.

Si algo ha cambiado en estos diez años para el director de «La Ratonera» ha sido la proliferación de compañías asturianas. «Cuando empezamos había sobre una docena; ahora somos más de treinta. Eso es bueno porque, aunque toquemos a menos, empujamos más y ejercemos más presión a los organismos públicos», asegura el dramaturgo.

Flanqueado por su equipo directivo (compuesto por Pedro Lanza y Eva Vallines), Corte echa en falta más apoyos presupuestarios a la publicación cuatrimestral. «Siempre nos parece poco todo lo que se haga, pero sí es cierto que ahora hay una mayor voluntad teatral», apunta. «A la hora de exigir responsabilidades, los que menos cumplen son los ayuntamientos, porque no aplican una política teatral óptima», asegura.

En cuanto a la programación de los teatros de la región, el director de «La Ratonera» pone un punto negro sobre la Laboral, porque «el calendario se hace de espaldas a los mejores profesionales asturianos», dice. Según argumenta Corte, «ponen poca atención al espacio dramático de Asturias».

El premio de honor pretende «defender la continuidad de esta publicación, que ha servido de plataforma tanto para la reflexión abierta como para el debate de las distintas inquietudes del teatro». Sin embargo, «La Ratonera» no pasa por uno de sus mejores momentos. «Queremos que este galardón nos sirva de respaldo y para promocionar esta revista», confiesa Corte.