J. L. A.

El Musel, que cerró 2009 con importantes premios, entre ellos el que le concedió la European Sea Ports Organization al mejor desarrollo de un plan sociourbanístico de identificación entre un puerto y su ciudad, se ha convertido en la dársena española con más proyectos de investigación, desarrollo e inversión.

Es uno de los caminos por los que se ha internado la Autoridad Portuaria de Gijón para diversificar su tradicional perfil industrial e intentar atraer, en el complejo proceso de crecimiento al que está obligado por la ampliación de El Musel), empresas y mayor valor añadido para Asturias. Entre los proyectos incluidos en el séptimo programa marco europeo de I+D+i, para el periodo 2007-2013, destacan las iniciativas relacionadas con la logística y la intermodalidad, la mejora de la seguridad en infraestructuras de transporte, la vigilancia medioambiental (el pez robot), los buques ecológicos y los corredores verdes para transporte sostenible o las operaciones portuarias seguras mediante satélite.

Otra de las importantes iniciativas que encabeza El Musel, junto con la Cámara de Comercio de Oviedo (muy implicada en hacer del superpuerto una dársena de referencia en el Arco Atlántico), es el programa «Proposse», al que la UE ha dotado con 2,1 millones. El objetivo es lanzar, en sintonía con los puertos de Aveiro (Portugal), Le Havre (Francia), Cork (Irlanda) y Poole (Inglaterra), una primera gran conexión atlántica que permita la colaboración de puertos de cinco países para la importación y exportación de las mercancías de pequeñas y medianas empresas. Las pymes representan el 75 por ciento de los movimientos comerciales de la UE, aunque hasta ahora son las grandes empresas las que han venido monopolizando la atención de puertos y navieras. Algo está cambiando. El 19 de febrero de 2009, hace un año, el Puerto llegó a reunir a 200 directivos para hablar del transporte de mercancías y su futuro, ligado al contenedor.