M. SUÁREZ
Carla Zanfaño, zamorana de 19 años, estudia en el Instituto de Roces un módulo de integración social; Natalia Fernández es una de sus compañeras de clase, tiene 21 años, procede de Siero; Antonio de Cea, auxiliar de vuelo que ahora trabaja de camarero, llanisco, de 25 años. Los tres comparten piso desde ayer en el número 54 de Eleuterio Quintanilla, en el barrio de El Llano. Tan sólo tendrán que pagar 122 euros mensuales por persona y en ese precio están incluidos desde la comunidad a los gastos de luz o gas.
Con ellos ya son 49 los usuarios del programa de pisos compartidos que la Empresa Municipal de Vivienda (Emvisa) gestiona desde hace siete años en colaboración con el Conseyu de la Mocedá. El concejal Francisco Santianes y el presidente de los jóvenes gijoneses, Jordán Suárez, entregaron ayer las llaves del decimoséptimo inmueble que se incorpora a este dispositivo municipal. A lo largo de 2010 se ampliará la oferta con otros dos pisos, también situados en las antiguas casas de los maestros de Eleuterio Quintanilla. Emvisa los entrega rehabilitados y con mobiliario nuevo.
Este programa forma parte de una política de vivienda encaminada a facilitar la independencia de jóvenes que, como Carla, Natalia o Antonio, «no podemos ni comprar ni alquiler al precio de mercado». Una política compartida por el Principado en la que tienen cabida los 292 pisos de promoción pública que se están construyendo en el Área Residencial de Roces. El plazo para la presentación de solicitudes se cerrará el próximo 27 de febrero. Según informaba ayer la gerente de Emvisa, Cristina Tuya, más de 8.000 personas han recogido la documentación necesaria y 1.180 formalizaron ya su petición.
