R. V.

El Ayuntamiento concretará esta semana la contratación de las obras de restauración de los restos arqueológicos hallados en un solar de la calle de Recoletas, en el barrio de Cimavilla. El precio de licitación de estos trabajos, que tienen fijada una duración de tres meses, es de casi 100.000 euros, con los impuestos incluidos. Esta actuación arqueológica, aunque de menor envergadura, se suma a la realizada en el entorno de la vieja Fábrica de Tabacos y que favorece el conocimiento que Gijón tiene de su pasado romano.

La atención sobre la calle de Recoletas comienza en el año 2004 cuando el derribo de tres viviendas en la zona permiten desarrollar una nueva excavación arqueológica sobre la muralla romana. Los restos aparecidos, explican los expertos, «forman parte del lienzo intramuros y del acceso este de la puerta principal de la ciudad; además de localizarse pavimento romano de cantos rodados y otros de argamasa». Todo ello «hace plantear su recuperación, ya que su descubrimiento permite tener una comprensión más exacta de cómo fue la estructura de la puerta principal de la muralla que daba acceso a la ciudad romana».

Esa conservación debe partir de un trabajo previo de restauración y documentación de las piezas encontradas, que es el que ahora se contrata desde el Ayuntamiento.