Begoña suena a Feten

- 16.30 y 20.00 horas: «Einstein» de «Ados Teatroa» en el Antiguo Instituto.

- 16.30 horas: «La tempestad» de «La Companyia del Princep Totilau» en el Antiguo Instituto.

- 17.00 horas: «¡Silencio!, lectores trabajando» de «Tras la puerta Títeres» en el Antiguo Instituto.

- 17.00 horas: «Pista que vengo!!» de «Tot Circ» en Begoña.

- 17.00 horas: «¿Bailas?» de «Nats Nus Dansa» en Jovellanos.

- 17.30 horas: «Bebé Charli» de «Association de Malfaiteurs» en Begoña.

- 23.00 horas: «La maldición de Poe» de «Teatro Corsario» en el Antiguo Instituto.

Eloy MÉNDEZ

Begoña empezó a sonar ayer a Feten. Aunque la jornada inaugural de la Feria Europea de Teatro para Niños y Niñas se vivirá hoy, las actividades de «Un sábado en danza» -concentradas casi todas en el Antiguo Instituto- y muchos artilugios sonoros en el paseo de Begoña dieron ambiente de escenario teatral a la ciudad. Hasta el martes, el paseo de Begoña acogerá una colección de estructuras musicales realizadas por el artista francés Etienne Favré. Estructuras que están pensadas para que los niños hagan sonar diferentes artilugios: unas botas de agua, guantes sorpresa, cacharros de cocina, una rueca con bolas o un laberinto con «trampas» hicieron las delicias en el paseo.

Pero también hubo actuaciones de baile y títeres, con la genuina idea de abarcar a un público que va desde «los 3 a los 103» años, como advertía en su carta de presentación «Teatro Plus». La compañía interpretó en el Antiguo Instituto la obra «Tiempo perdido», una crítica acerca de las actuales relaciones entre padres e hijos. El grupo, un clásico en el certamen, abrió fuego sólo una hora después de que los también asturianos de «Tras la puerta títeres» dieran el pistoletazo de salida a la decimonovena edición del festival con «Silencio, lectores trabajando». Pero como la jornada estaba dedicada especialmente a las compañías de danza, los catalanes de «Nats Nus Dansa» llevaron a Begoña su espectáculo «¿Bailas?», en el que la interacción con el público jugó un papel fundamental. Por su parte, «Aracaladanza» mostró «Nubes» en el Jovellanos (sólo como ensayo, ya que es el plato fuerte de la inauguración de hoy). Dicho espectáculo se inspira en «el espíritu de la pintura en la capital». El distribuidor de la compañía, Alberto Muyo, destacó la complejidad del montaje, ejecutado por nueve bailarines, «algo realmente complicado cuando se piensa en actuaciones hechas para niños».

La puntilla a la jornada corrió a cargo de «Zigzag Danza», que interpretó «Disculpe caballero» en el patio del Antiguo Instituto. Según la bailarina Estrella García, la combinación de la actuación de los dos actores y el guitarrista que dan forma a esta particular versión del Quijote, «supone una experiencia nueva y extraordinariamente original». En cuanto a los títeres, el responsable de «Teatro Plus», Aleksandar Churchich, resumió «Tiempo perdido» como «un análisis del poco tiempo que los padres dedicamos a nuestros hijos mediante una síntesis entre la adulta ingenuidad del clown y la infantil ingenuidad del títere». Y todo eso, sólo para empezar.