Miriam SUÁREZ

Sólo han pasado diez días desde que el Ayuntamiento implantara en la zona rural un servicio de autobús contratado con el Consorcio de Transportes de Asturias. Pero la Federación de Vecinos «Les Caseríes» considera que es tiempo suficiente para determinar que «hemos retrocedido 30 años». No convencen los trayectos y mucho menos los horarios, para cuya planificación tienen una sugerencia unánime: «Que se adecuen a los horarios de trabajo y de estudio, algo que no se hace ahora».

Tres representantes de «Les Caseríes» y otros tres del Consejo de Distrito se sentarán hoy, con esta exigencia, en la mesa de trabajo que promueve la Empresa Municipal de Transportes Urbanos (Emtusa) para buscar soluciones a su decisión de anular las líneas de autobús que recorrían la zona rural. La primera alternativa, consistente en contratar este servicio con empresas privadas a través del Consorcio, ha recibido un suspenso por parte de los vecinos.

Los portavoces de la parroquia han diseñado un borrador con sus conclusiones y propuestas, que ya remitieron al concejal Santiago Martínez Argüelles -presidente de Emtusa- para que conociese de antemano cuál va a ser la postura de la zona rural en la reunión de hoy. El documento incide en que «sólo restaurando el servicio público municipal que se extinguió tendremos los mismos derechos que el resto de los gijoneses». Entre tanto, «lo que se está haciendo con la zona rural es un agravio comparativo», sostiene la directiva de «Les Caseríes», en la que tienen representación las asociaciones vecinales de las 25 parroquias del concejo.

Partiendo de esta crítica, los vecinos solicitan, además de una nueva organización de horarios, que «se restablezcan las líneas anteriores a la implantación de los microbuses» y que «parroquias como Deva o Lavandera puedan recuperar los derechos que tenían antes de 2001 y que perdieron para que el autobús llegara a más sitios». El pasado mes de febrero, Emtusa decidía suspender sus trayectos a la zona rural por considerarlos económicamente inviables.

«Pedimos que se haga público el título justificativo del contrato del Consorcio», es otra de las reivindicaciones que hoy trasladarán a la mesa de trabajo de Emtusa. «Queremos saber por qué este servicio es deficitario para la empresa pública y no para la empresa privada», precisa la Federación vecinal que preside Soledad Lafuente, muy crítica también con los precios que ha fijado el Consorcio de Transportes de Asturias.

El billete en uno de sus autobuses cuesta 1,30 euros, cuando Emtusa cobra 1,10. Aparte, «no tenemos posibilidad de bonificaciones, como ocurre en las líneas de la empresa municipal». El escrito consensuado por los representantes de las distintas parroquias llevará una serie de documentos adjuntos con las peticiones particulares de algunas asociaciones de vecinos, como las de Somió, Deva, Lavandera, Vega-La Camocha, Cabueñes y Porceyo.