Eloy MÉNDEZ

Los responsables de la Empresa Municipal de Transportes (Emtusa) se comprometieron ayer ante líderes vecinales de la zona rural a estudiar la posibilidad de ampliar la línea de la compañía Medina que llega hasta Deva para que dé servicio también a la zona de la parroquia comprendida entre el merendero Casa Yoli y el Hospital de Cabueñes. Además, durante la reunión del grupo de trabajo creado tras la supresión de siete líneas del bus rural, los dirigentes de la empresa municipal también anunciaron que meditan abrir una nueva ruta entre Sotiello y el centro de Gijón, de acuerdo al modelo «de transporte a la demanda», es decir, en función de las necesidades diarias de los usuarios, que deberían avisar por teléfono previamente para que se ponga en funcionamiento esta prestación.

«Este tipo de transporte ya existe en otras ciudades europeas y puede ser una buena solución para zonas de poca densidad demográfica», explicó tras el encuentro el gerente de Emtusa, Luis Iturrioz, que no aclaró qué tipo de vehículo realizaría el recorrido. «Puede ser un taxi, un monovolumen o cualquier otro», señaló. Iturrioz se mostró satisfecho por el «clima de diálogo» con los vecinos, ante los que destacó los datos de las líneas privadas que Emtusa potencia desde hace dos semanas como alternativa a las siete suprimidas. «La línea a Deva tiene ahora una media de 41 viajeros diarios, mientras que la anterior R-1 que llegaba hasta la parroquia sólo tenía una media de ocho usuarios por día», argumentó. En este sentido, también dijo que la ruta hasta Caldones cuenta ahora «con 80 usuarios por día», frente a los dos que transportaba la R-2 eliminada. Menos optimista se mostró sobre la línea que une Lavandera y Vega, con «sólo tres o cuatro viajeros al día», una media similar a la de la antigua R-3.

El gerente de Emtusa también se comprometió a «estudiar cambios en algunos horarios» de las empresas privadas que realizan estas rutas. Y también dejó claro que desde Emtusa se «mejorará la difusión» de estos servicios, con el objetivo de «que la gente sepa a qué hora puede coger el autobús, cuál es su recorrido y los precios que tiene». En este sentido, recomendó que los viajeros habituales saquen el abono del Consorcio de Transportes para ahorrar gastos.