J. L. ARGÜELLES

Veintidós de los veintisiete países que constituyen la Unión Europea (UE) tienen litoral o son isleños. Entre todos suman 70.000 kilómetros de línea de costa. La superficie de mar de la que es responsable la UE es mayor que su superficie terrestre. Y, además, la Comisión Europea (CE) se ve obligada a mirar cada vez más al mar si quiere tener una política de transportes sostenible, es decir, menos agresiva con el medio ambiente, y con más altos grados de eficacia.

Son sólo algunos datos y la constatación de una nueva estrategia comunitaria. Ponen de manifiesto la importancia del sector marítimo -en auge en los últimos años- y la relevancia que adquiere, por tanto, que una ciudad sea elegida para acoger el «Día marítimo europeo», según todas las fuentes consultadas que tienen relación con la organización de este evento. Gijón está ante una oportunidad única desde mañana, lunes, con la presentación de los primeros actos de una cita considerada ya como el mayor encuentro de los organizados por España durante el semestre de su Presidencia de la UE, para mostrar su potencial como puerto de referencia en el Arco Atlántico y como plataforma logística de enlace entre la península Ibérica y el resto del continente.

La apuesta del Gobierno de España por Gijón aprovechando la Presidencia de turno de la UE es importante. También está justificada. Ha recibido el premio europeo a la mejor relación entre una ciudad y su puerto; antes de finalizar 2010 habrá concluido su ampliación portuaria, una compleja obra marítima que le permitirá duplicar sus actuales capacidades; además, el Principado tiene en marcha un proyecto para hacer en este municipio una zona de actividades logísticas que ocupará, cuando esté totalmente urbanizada, cuatro millones de metros cuadrados de suelo. Son planes que guardan estrecha conexión con la política europea marítima y de transporte. Si añadimos que El Musel será el primer puerto español con una autopista del mar que conectará el norte peninsular con el litoral occidental francés, en concreto con Nantes-Saint Nazaire, parece que la decisión del Ejecutivo español está avalada por un argumentario consistente.

De la importancia que tiene este encuentro, que se prolongará hasta el próximo día 21 y que fue presentado el pasado jueves en Madrid por el presidente del Principado, Vicente Álvarez Areces, y por el secretario de Estado para la UE, Diego López Garrido, da idea que Gijón toma el relevo de Bruselas y Roma, las dos ciudades designadas con anterioridad para la celebración del «Día marítimo europeo». La fecha elegida por la CE para concretar anualmente el debate sobre asuntos marítimos, que en la convocatoria gijonesa tendrá su eje en la innovación, es el 20 de mayo.

La representación institucional que acudirá a Gijón en estos días ayuda a entender la importancia que se concede a estas jornadas, en las que participarán unos 1.500 expertos en distintos asuntos marítimos. Los Príncipes de Asturias acudirán al Principado con motivo de esta celebración. Don Felipe presidirá el próximo jueves, a las nueve de la mañana, la sesión plenaria del «Día marítimo europeo», en la que también estarán presentes López Garrido y la comisaria de Asuntos Marítimos y Pesca, María Damanaki. Tres ministros españoles tienen comprometida sus asistencia a este encuentro: Elena Espinosa (Medio Ambiente, Medio Rural y Marino), Miguel Sebastián (Industria) y Cristina Garmendia (Ciencia en Innovación), además de la ministra de Economía de Grecia, Louka Katseli, y del ministro de Transportes de Alemania, Peter Ramsauer. Junto a Damanaki, también se ha anunciado la participación del comisario europeo de Medio Ambiente, Janez Potocnik, y la del presidente del Parlamento europeo, Jarzy Buzek.

La Laboral, rebautizada como Ciudad de la Cultura, es el escenario elegido para la mayor parte de los numerosos foros y debates convocados, en los que se analizarán, como se ha dicho, el papel de la innovación en las políticas marítimas. La Autoridad Portuaria de Gijón, que cobra un protagonismo especial en estas jornadas, acogerá en sus instalaciones varios actos. La programación prevista trata de combinar el examen y la discusión entre políticos y especialistas con otras actividades abiertas al público.

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