M. C.

Alrededor de dos centenares de personas, según algunos asistentes, participaron ayer en la protesta que convocaron los sindicatos CSI, CGT y Suatea-SF en la Plaza Mayor de Gijón, a las siete y media de la tarde, para protestar contra «las medidas de ajuste y recortes sociales del Gobierno de Zapatero», según explicaron los organizadores.

Se trata del primer acto de protesta, al que estos sindicatos minoritarios quieren dar continuidad con otros hasta desembocar en una huelga general. Para ello, quieren recabarán el apoyo de asociaciones vecinales, colectivos sociales, otros sindicatos minoritarios y «las bases de UGT y CC OO», sindicatos a los que reprochan sus «coqueteos con el Gobierno», según Manuel Nieto, responsable de organización de CSI.

«Usaron a Grecia como conejillo de indias y ahora han trasladado los recortes a otros países de la Unión Europea, castigando a los pensionistas y a los afectados por la ley de dependencia, que son los más débiles», señaló Beatriz Quirós, de Suatea.

La sindicalista añadió que, además el Gobierno del PSOE está intentando «enfrentar a los trabajadores entre sí» al anunciar recortes salariales para los funcionarios. Esta sindicalista se preguntó por qué se recortan sueldos de funcionarios, que en muchos casos «son mileuristas, mientras nadie habla de tocar los altos cargos colocados a dedo en los ministerios o en las consejerías, ni de la inflacción de funciones duplicadas en la Administración, ni de los contratos blindados en empresas públicas, que funcionan como chiringuitos para colocar a los amiguitos de turno».