M. C.

«Asturias tiene la tasa de fecundidad más baja de España, y España tiene una de las más bajas de Europa. ¿Por qué? Nueve de cada diez mujeres trabajan en Asturias en el sector servicios, que es el que tiene la tasa más alta de temporalidad, más trabajo a tiempo parcial y menor salario. A esto se une que las mujeres se han incorporado al ámbito laboral, pero los hombres no lo han hecho al ámbito doméstico». La reflexión la hizo ayer la socióloga del Instituto Asturiano de la Mujer Marián Uría Urraza, en la jornada sobre la acción por la salud de las mujeres que organizó CC OO en la Escuela de Hostelería de Gijón.

Marián Uría Urraza señaló ayer que las mujeres se enfrentan comúnmente a la disyuntiva de desarrollar una carrera profesional o dedicarse a criar a los hijos de la pareja. «A los 33 o 34 años muchas empiezan a abandonar el mercado de trabajo por la crianza», apuntó.

Según su opinión, otros de los factores que influyen en la baja natalidad en Asturias son la carestía de la vida y la pérdida del rol maternal como elemento fundamental de las mujeres.

Asturias es el caso más acusado de lo que ocurre en España, que «no es un Estado de bienestar, sino que sus carencias las suplen las supermujeres y las abuelas que hacen labores de guardería. Faltan escuelas de cero a tres años, faltan recursos para atender a personas mayores dependientes y faltan guarderías», señaló la socióloga, que también considera fundamental que los padres atiendan a sus hijos durante sus primeros días de vida. En ese sentido, indicó que «es fundamental el permiso parental, que es de 13 días y que se va a ampliar a cuatro semanas el año que viene», como una de las medidas para propiciar un «cambio de roles», opinó la socióloga.

Otra de las causas de la menor natalidad en Asturias respecto al conjunto de España es el menor número de inmigrantes en el Principado. «Asturias sólo tiene un 4% de mujeres inmigrantes», que tienen una media de hijos muy superior a las españolas.

Ese efecto de la inmigración, que contribuye a incrementar la natalidad, se pierde, sin embargo, en las segundas generaciones, en las que las mujeres pertenecientes a familias de origen extranjero asimilan las costumbres del país de acogida, explicó.

Las jornadas de CC OO fueron inauguradas ayer por la alcaldesa de Gijón, Paz Fernández Felgueroso; por la directora del Instituto Asturiano de la Mujer, María Fernández Campomanes; por el secretario general de la Unión Regional de CC OO, Antonio Pino, y por el secretario general de la Unión Comarcal de CC OO de Gijón, Juan Sánchez.