Eloy MÉNDEZ
Punto y final a nueve meses de aprendizaje, diversión y esfuerzo. Los colegios de primaria de la ciudad cierran hoy sus puertas para los niños hasta el 9 de septiembre, con los alumnos de Sexto como protagonistas, porque abandonan las clases de los pequeños para dar el salto al instituto. El concejal de Educación, Justo Vilabrille, celebró con los dos grupos del último curso del CP Asturias su despedida del centro escolar y les aconsejó que «presuman siempre del lugar en el que estudiaron» y que, «de vez en cuando», visiten a sus ya antiguos profesores.
El gimnasio del Asturias se transformó en un improvisado teatro lleno de bancos ocupados por los padres que, cámara en mano, captaban todo lo que sucedía. Los niños entraron por el pasillo central en parejas y con un chal con el escudo del colegio sobre los hombros. Después, se colocaron en los primeros asientos para asistir a una ceremonia sencilla, pero muy emotiva por la cantidad de recuerdos acumulados. En la mesa presidencial, además del concejal, estaban la directora Marta Iglesias y las tutoras Lucía Pescador y Margarita García. «Lleváis para el instituto una base que habéis adquirido en un centro emblemático, por eso, es justo que recordéis al equipo docente, porque os ha ayudado en vuestro camino y porque, entre los mayores, seréis como su prolongación más allá del colegio», afirmó Vilabrille.
Por su parte, la directora agradeció a los niños «los nueve años que, casi todos, habéis pasado con nosotros», desde su llegada a Educación Infantil. También hubo tiempo para escuchar un texto conjunto de los chicos, que leyó en voz alta Ángel Bastián. «Nos vamos con la maleta llena de amigos y recuerdos», finalizó, antes de que la profesora Margarita García les aconsejara a todos «buscar la suerte para ocupar el sitio que os corresponde en el mundo». Por último, los alumnos recibieron un diploma y un CD cargado de fotografías que recogen su paso por el Asturias. Su visionado ocasionó muchas risas y alguna lágrima en los ojos de varias madres emocionadas.
