Pablo TUÑÓN

El Presidente del Principado, Vicente Álvarez Areces, mostró ayer su disconformidad con los cambios en la regulación del voto de los emigrantes españoles. «Hemos dicho siempre lo que no nos gustaba, como no nos gusta los que se está enfocando, que todavía no es firme, en cuanto a esa Ley Electoral y el enfoque del voto de la emigración», proclamó Areces durante el acto de inauguración de la «Jornada sobre emigración asturiana», organizada por la Federación Internacional de Centros Asturianos (FICA).

La polémica sobre el voto emigrante se levantó hace un mes, cuando la Comisión Constitucional del Congreso de los Diputados aprobó la reforma de la ley electoral que limitaba el voto de los españoles en la diáspora. La reforma prohibió la participación emigrante en las elecciones municipales y estableció el voto rogado, previa solicitud, para las autonómicas y generales. «Aunque no es la única medida de vinculación de la emigración con nuestra tierra, el voto es importante porque es el reconocimiento del pleno derecho de ciudadanía de los emigrantes», aseguró Areces, quien no quiso profundizar más en el tema pero que matizó que «a nadie se le ha pedido una ideología determinada ni adscripción, simplemente amor por su tierra». La Federación Socialista Asturiana (FSA) ya tildó en julio de un «error» la reforma electoral y la calificó como «una restricción de derechos a los emigrantes españoles», cuyo voto fue decisivo en varias ocasiones en el Principado.

Areces destacó «tres circunstancias» de su política con los emigrantes. «En primer lugar, he tratado que allí donde haya asturianos, se sientan próximos a nosotros», aseguró el presidente, que en segunda instancia resaltó la presencia institucional del Principado en el exterior. «Conseguimos tener tanta relevancia cuando vamos a otros países por la gran embajada que tenemos y por nuestra contribución internacional, mucho mayor que el tamaño de nuestra región», dijo Areces. Como tercera circunstancia, el Presidente del Principado habló de la salida de las empresas asturianas al exterior. También elogió la decisión de FICA de otorgar el premio «La Carabela», que reconoce las labores de personas y entidades en favor de los emigrantes, a la alcaldesa de Gijón, Paz Fernández Felgueroso.

El presidente del Principado se refirió también al «éxito» que ha supuesto la Escuela de Asturianía, la cual imparte formación específica sobre cultura asturiana a jóvenes descendientes, especialmente nociones de baile y gaita. La institución se puso en marcha hace tres años y ha acogido a 76 participantes en períodos de quince días. Por su parte, José Luis Casas, presidente de FICA, agradeció a Areces «toda su sensibilidad, todo lo que ha hecho por los centros asturianos y el haber dado a FICA la medalla de plata de Asturias».

Durante la inauguración, a la que también asistieron María José Ramos, consejera de Presidencia, y Teresa Ordiz, viceconsejera de Seguridad e Interior, Areces también puso a FICA como un ejemplo de que «la unión hace la fuerza» y aseguró que «en el último rincón del mundo habrá asturianos».