Cada año se lidian toros y más toros por las plazas de España. Con la crisis y la consiguiente reducción de festejos son muchos los animales que han «sobrado» la temporada pasada en las fincas.

Al principio de curso las fuertes lluvias hicieron que los ganaderos se apresuraran a justificar la posible falta de fuerza de los toros. Ha quedado claro que el agua no ha tenido nada que ver con la falta de casta que arrastran muchas ganaderías.

Entre las que han destacado, sobremanera, está Alcurrucén. La encargada de abrir las corridas de toros en Gijón. Dirigida por la familia Lozano, antiguos gestores de Las Ventas, han cubierto una gran primera parte de la temporada con grandes éxitos. Con otro de sus hierros, misma procedencia, El Cotijillo, pudo Juan Bautista abrir la Puerta Grande de Madrid.

Otra de las ganaderías que más ha lidiado en Gijón en los últimos años ha sido el Conde de Mayalde. Los toros de Rafael Finat han dejado buena impresión en sus comparecencias en El Bibio. Otro de los feudos de la vacada toledana es Dax, Francia. Este año regresó a Madrid con una novillada muy aplaudida en el arrastre.

Una de las ganaderías predilectas es la de Jandilla. La divisa de Borja Domecq cuenta con el respaldo de las figuras de primer orden y también con el crédito conseguido en esta plaza el curso pasado con «Envidioso», toro para el que se le pidió el indulto y al que Miguel Ángel Perera cortó las dos orejas y rabo.

Al ruedo saltará esta feria la ganadería con mayor antigüedad del campo bravo. Bien es cierto que desde su creación ha variado su encaste y procedencia. En la actualidad proviene de la ganadería de Zalduendo, encaste Domecq, y muy del gusto de los toreros. José Vázquez lidiará los toros de a pie de la corrida mixta.

Tanto Montalvo como Sánchez-Arjona son viejas conocidas del público de Gijón. El año pasado Montalvo lidió sin mucha fortuna un encierro en Salamanca, provincia donde pastan los toros, y suelen lidiar en plazas de menor categoría que las anteriores.

La novillada responde a la divisa salmantina de José Cruz, con una camada corta que lidia novilladas principalmente. En Gijón debutará y abrirá la feria de Begoña 2010.

El toro de Gijón no es un toro ni grande ni chico. Un toro hecho a medida de las figuras. En el caso de «El Bibio» tenemos un veedor muy valorado en el mundo del toro. Desde hace un tiempo ha subido el número de toros ovacionados y también de toros premiados con la vuelta al ruedo reduciéndose el número de toros devueltos.

Ahora compartimos veedor con Málaga y muy posiblemente el año que viene con la plaza de toros de Las Ventas puesto que Carlos Zúñiga hijo suena como nuevo encargado de seleccionar los toros para la plaza de toros de Madrid.

Esperamos que las ganaderías elegidas sirvan para que la conexión con los toreros haga que disfrutemos. Aunque ya se sabe, el torero propone, Dios dispone y el toro descompone.