R. V.

El Ayuntamiento impondrá medidas a las correas de los perros y asumirá permitir que se dé comida a los gatos callejeros siempre que se garanticen principios de limpieza e higiene. Estos son dos cambios que se incorporarán a la futura ordenanza de regulación y tenencia de animales de compañía tras analizar las 157 sugerencias ciudadanas que recibió el borrador del documento durante el tiempo que estuvo expuesto a consulta popular en la web del Ayuntamiento de Gijón. Otras modificaciones vinculadas a estas sugerencias están pendientes del estudio de los técnicos municipales, según indicó ayer la concejala Pilar Pintos. El texto final, enriquecido con las aportaciones de los vecinos, pasará por la Junta de Gobierno antes de buscar su aprobación inicial en el Pleno. Será entonces cuando se abra el período oficial de información pública para recibir las alegaciones de los gijoneses. Pintos cuenta con que la ordenanza entre en vigor a finales de este año, después de completar su tramitación administrativa.

Una de las singularidades del documento es que marca 43 espacios en la ciudad donde los perros podrán estar sin correas. La información sobre estos espacios y sobre los artículos centrales de la ordenanza será recogida en folletos explicativos que se distribuirán entre los propietarios de mascotas. A este material se sumarán los paneles divulgativos a instalar en las zonas libres para perros que no estarán valladas sino marcadas con unos hitos naranjas que puedan contrastar con el verde del césped. La ordenanza también establece una larga veintena de infracciones que se corresponden con sanciones económicas que van de los 300 a los 3.000 euros, según su gravedad.