C. JIMÉNEZ

El bajo consumo que presentan los vehículos eléctricos es uno de los motivos que llevaría a los gijoneses a cambiar su coche o moto actual por uno cien por cien eléctrico. Así se desprende de las encuestas realizadas en el marco de la iniciativa «Gijón living car» que arrancó en junio de 2009 bajo el modelo de colaboración público-privada y que suma en la actualidad once socios.

Con el objeto de hacer partícipes de la tecnología del vehículo eléctrico a los ciudadanos, se han realizado tres experimentos de carácter social dirigidos a tres sectores de población concretos para examinar las prestaciones de este nuevo sistema de movilidad, así como la prueba de los puntos de recarga. La primera conclusión de estos estudios es que se ha incrementado de manera notable el porcentaje de población que conocía la existencia de estos vehículos, pasando del 48 por ciento en la primera experiencia, en agosto de 2009, en la Feria Internacional de Muestras de Asturias, a un 81 por ciento en el caso del campus universitario de Gijón, donde se celebró última sesión en marzo pasado.

En cuanto a la característica más valorada de los conductores, destacan todos ellos como aspecto muy positivo el bajo consumo de los eléctricos en relación con los vehículos convencionales; sin embargo, dan menos importancia a la reducción en el mantenimiento y a la ausencia de ruido. Es más, ese carácter silencioso de los coches y motos eléctricos está considerado un factor negativo de esta tecnología.

Las actividades desarrolladas con los trabajadores de los parques tecnológicos de Gijón y Llanera han permitido poner sobre la mesa las necesidades de este sector, que habitualmente realiza desplazamientos medios y cortos entre diferentes localidades del centro de la región. Para el experimento, el personal de ambas áreas empresariales tuvo a su disposición bicicletas, motos y cuatriciclos eléctricos. En esta experiencia participaron 272 personas frente a las 1.100 de la edición de 2009 de la Feria de Muestras.

Los encuestados valoraron la flota eléctrica como una opción de movilidad personal válida en el 70 por ciento de los casos.

Por otro lado, el interés por contar con la tecnología eléctrica en las flotas empresariales desciende al 27 por ciento debido a que buena parte de los encuestados eran alumnos del campus universitario de Gijón y no se encontraban trabajando en ese momento. Los 167 estudiantes que participaron del experimento probaron bicicletas, motos, cuatriciclos y coches eléctricos en la zona de Viesques el pasado mes de marzo.

En cuanto a la experimentación técnica, cabe recordar que ya se han instalado cinco puntos de recarga en la sedes de Temper, Isastur y Fundación Prodintec, tres de los socios fundadores de la iniciativa «Gijón living car» junto al Ayuntamiento de Gijón y otras entidades. El servicio público de Inspección Técnica de Vehículos del Principado (Itvasa) se encargará del mantenimiento de la flota a disposición del proyecto.