Gijón de Sidra se concibió como una plataforma de difusión mundial en torno a uno de los elementos más valiosos y de fuerte identidad y tradición asturiana, la sidra.

En Asturias se celebran muchos certámenes sidreros, pero lo que hace a Gijón de Sidra diferente es la colaboración de todos los sectores involucrados para potenciar el valor de la sidra, que se concibe como una fiesta tradicional en cada sidrería, contagiando esta pasión a todos los clientes autóctonos y visitantes.

El público se está volcando con una iniciativa que evoca las raíces y las costumbres, como son cantar juntos cancios de chigre, acompañados de una buena botella sidra.

Hasta el domingo 33 sidrerías y 33 llagares participan en esta iniciativa, que busca devolver el esplendor sidrero a las calles de al villa. Los asturianos volverán a tener la sidrería como centro de actividad social y gastronómica, recuperando y enseñando a todos que las sidrerías son mucho más que un simple lugar de encuentro.

Durante esta semana la ciudad vivirá un acontecimiento gastronómico y cultural destinado a convertirse en un referente nacional e internacional de atracción turística y que, además, eduque al consumidor en el mundo de la sidra.

Durante esta semana cada sidrería acogerá palos de la mejor sidra escogida de cada llagar asignado durante una semana, estableciendo un precio atractivo, que incluye una botella de la sidra acogida por el establecimiento y una cazuelita de creación propia que sirva cada sidrería como acompañamiento.

Todas las sidrerías participantes aparecerán en la herramienta de información oficial, el «sidromapa». Se trata de una guía que mostrará, por un lado, las rutas propuestas con las 33 sidrerías participantes y el tipo de sidra de calidad que ofrecen, y, por otro, el mapa de los 33 llagares productores de las marcas que acoge cada una, para que sea didáctica y se localice correctamente lo que se va a catar.