Ángel CABRANES

Luz tenue, música alta y un olor artificial a rosas envuelven la atmósfera de un festival que hace del sexo un espectáculo. «Eros Asturias» abrió ayer sus puertas en la Feria de Muestras, con la participación de sesenta artistas y cuarenta empresas que, hasta mañana, acercarán al público desde las últimas novedades en juguetes eróticos, hasta la posibilidad de participar en un intercambio de parejas. «De lo que se trata es que la gente se pase un buen rato disfrutando del sexo», explica Anastasia Mayo, actriz porno que participa en uno de los cuatro escenarios donde, de manera continua, se representan números eróticos en directo.

«La última novedad que nos ha llegado se denomina "la pinza", y sirve para estimular el "punto g" y el clítoris al mismo tiempo», explica Miguel Mollano, dueño de uno de los puestos de venta de juguetes eróticos que se pueden encontrar en el certamen. Este tipo de stands son los más comunes entre los 23 que se distribuyen a lo largo del pabellón central del recinto ferial «Luis Adaro», que alcanza una entrada de 200 personas cuando apenas se cumple una hora de su apertura. La mayoría, hombres de mediana edad y jóvenes que amortizan los 20 euros de entrada tomando fotos de los espectáculos eróticos en directo.

«El sadomasoquismo no admite la violencia; es algo consensuado entre las personas que lo practican. Un divertimento al estilo XXL», asegura «Ama Mónika», que junto a su marido interpreta escenas de este tipo de tendencia sexual. Látigos, máscaras de cuero y otro tipo de complementos destinados a la práctica de diferentes posturas la acompañan, además de las atentas miradas de los asistentes.

A pocos metros, la estrella del porno Yoha invita a un joven del público a compartir con ella protagonismo en otro de los escenarios. Un pequeño tanga es la única prenda que viste esta actriz colombiana que provoca al espontáneo con sensuales gestos y movimientos. Entre bambalinas, Anastasia Mayo y Jade bromean con diferentes vibradores mientras esperan a que llegue su turno para saltar a escena. «Pocas veces puedes tener mujeres como estas tan cerca», reconoce uno de los espectadores, que prefiere pasar de incógnito en su visita al «Eros Asturias».

«Sólo hay dos locales de intercambio de parejas en Asturias y hemos decido habilitar uno aquí para aquellos que estén interesados en el swinger», explica Pepe Cera, encargado del pequeño salón privado acondicionado para que «matrimonios liberales accedan de manera gratuita y vivan nuevas experiencias». Una veintena de sillas rodean una superficie acolchonada que hace las veces de cama, y en ella se invita a que «la gente pueda subir y desnudarse, les miren, o incluso participen. Eso sí, no se pueden mantenerse relaciones sexuales, simplemente ofrecemos la posibilidad de que puedan empezar a conocerse», recalca Cera.

En uno de los extremos se encuentra otra de las zonas acotadas del recinto. Se trata del improvisado plató que servirá para el rodaje de «Haz que me duela el coño», una película X que se gestará este fin de semana en el recinto ferial. «En la puerta de entrada hemos colgado un programa en el que se detallan los actores participantes y el horario de cada escena para que, aquellos que quieran ver cómo es nuestro trabajo, vengan a contemplarlo de cerca», descubre Carlos Resa, director del filme.

Las propuestas no cesan, y en el primer piso del pabellón ya se celebra la primera de las reuniones de «tapper sex», en la denominada «Zona íntima». «Debemos aprender a diferenciar los juguetes de calidad y también sacarle la máxima utilidad a lubricantes y aceites de masajes», afirma el director de la charla. Las propuestas se acumulan para tener el sexo al alcance de la mano.