M. S.

Feve puso fin a 158 años de presencia en El Humedal el sábado por la noche. Ayer, 24 horas después de su traslado a la nueva estación de Sanz Crespo, el presidente de los Ferrocarriles Españoles de Vía Estrecha hacía balance: «Las primeras circulaciones han comenzado con normalidad, salvo por algunas incidencias en el material móvil de motor que son normales».

Ángel Villalba también apuntó que «hemos tenido una nutrida demanda, que responde a nuestras expectativas». El comité de empresa lleva tiempo advirtiendo de una posible merma de pasajeros como consecuencia del cambio de ubicación. Aunque el máximo responsable de la compañía confía en que «utilicen esta estación de salida de 700.000 a un millón de personas al año», cifra que esperan «sea más densa» cuando entre en servicio la estación definitiva de Moreda.

La terminal de Sanz Crespo se encuentra a casi un kilómetro de distancia de El Humedal y, por tanto, del centro de Gijón. «Pero también sitúa a los viajeros cerca de equipamientos importantes de la ciudad y de algunos de sus barrios más poblados», puntualizó Villalba. No obstante, por lo que pueda pasar, Feve ofrece a sus viajeros un servicio de lanzaderas entre Sanz Crespo y la Gota de Leche. Estos autobuses son gratuitos.

Para Feve, lo que se ha puesto en marcha es «el gasto de los primeros 30 millones de la operación». Cantidad en la que se incluyen actuaciones complementarias como las que se llevan a cabo en los apeaderos de Tremañes y La Calzada, o el «by-pass» de Aboño que desvía los trenes de mercancías. «Esta estación es una pieza fundamental para proseguir con toda la supresión de la barrera ferroviaria», defendió el consejero de Infraestructuras del Principado, Francisco González Buendía, que ayer visitaba por primera vez las instalaciones de Sanz Crespo y se declaró «gratamente sorprendido».

La puesta en marcha del nuevo equipamiento no ha estado exento de críticas. Aunque, según la Alcaldesa, «se trata de una estación muy digna para eliminar la barrera ferroviaria sin perjuicio para los viajeros».