Eloy MÉNDEZ

En El Muselín no piensan bajar los brazos ante los planes municipales para desalojar el barrio. Casi un centenar de vecinos se reunió ayer en la sacristía de la iglesia de Jove para conocer de primera mano las respuestas a las alegaciones que presentaron contra el Plan General de Ordenación (PGO) y que llevaron al gobierno local a modificar la calificación del suelo para convertirlo en urbano. «Desde luego no es algo que nos parezca suficiente, porque simplemente sería beneficioso de cara a las expropiaciones, que es precisamente lo que no queremos», aseguró el abogado de la Federación de Asociaciones de la Zona Rural «Les Caseríes», Antonio García. El letrado anunció además que redactará un comunicado para exigir a la CUOTA, organismo regional encargado de dar el visto bueno legal al nuevo planeamiento urbanístico, que «analice con precisión y tranquilidad» la revisión del documento.

«Está claro que el Ayuntamiento quiere aprobar el PGO antes de las elecciones de mayo, por eso es posible que la CUOTA se dé muchas prisas para tomar su decisión, lo que es muy peligroso», sentenció García, tras advertir a los asistentes de que «estamos abocados a un proceso contencioso». «La lucha será larga, por eso tenemos que estar preparados para ella», aseguró, para después denunciar que los argumentos esgrimidos por la concejalía de Urbanismo para desalojar el barrio «se caen por su propio peso». «Resulta que alegaron falta de seguridad por posibles derrumbes de la ladera donde están las casas y ahora rectifican parcialmente para englobar esta actuación dentro de dos planes urbanísticos, uno de ellos el que tiene que ver con la avenida Príncipe de Asturias», sentenció.

Según el abogado, la redacción de estos informes los ha realizado ahora un ingeniero de Caminos y no un geólogo, como ocurrió en un primer momento. «Nos dicen que los riesgos en el suelo podrían causar problemas dentro de tres o cuatro años, pero nosotros tenemos informes propios que hablan de que El Muselín se asienta en una de las zonas más seguras del concejo», apuntó. «Este barrio no es Villacajón, así que tampoco pueden decir que vivís en infraviviendas», continuó. Por su parte, los vecinos mostraron su total oposición a los planes municipales, tras los que ven «intereses ocultos». «Habrá más movilizaciones de manera inminente», advirtió el presidente de la Asociación, Ángel Piñera.