M. CASTRO

«Falta de buena fe». De esta forma define la actuación del Ayuntamiento de Gijón, durante el anterior mandato municipal, la sentencia del juzgado de primera instancia número seis de Gijón que devuelve a la Universidad la parcela que ocupó la «Semana negra» en su última edición. La parcela, propiedad de la Universidad desde 1986, fue registrada por el Principado a su nombre en 2005 y permutada en 2009 por nueve fincas municipales, valoradas ambas en 2,8 millones de euros. La validez de aquella permuta también ha quedado ahora en entredicho, una situación que se podría solucionar mediante la renegociación o la devolución de las parcelas. Ayuntamiento y Principado gastaron más de tres millones de euros en acondicionar la parcela para acoger la «Semana Negra». El juez considera que el Ayuntamiento «difícilmente podía ignorar» que la finca que adquirió al Principado era de la Universidad.

La sentencia aún no es firme y en teoría sería posible recurrirla. Eso es lo que reclama el grupo municipal del PSOE. En el pleito, el Ayuntamiento basó su defensa en sostener que había actuado de buena fe, dado que la finca que adquiría figuraba registrada a nombre del Principado. El juez sostiene lo contrario.

El periplo de la polémica parcela comenzó hace décadas y tuvo diversos protagonistas. El solar formaba parte del patrimonio de la extinta Fundación José Antonio Girón, que regentaba la Universidad Laboral. En 1979 los terrenos que hoy ocupa el campus pasaron al Instituto Nacional de Enseñanzas Integradas (INEI) y tras su disolución, en 1980, al Ministerio de Educación y Ciencia. En 1986 el Ministerio adscribió esos terrenos a la Universidad de Oviedo lo que, en base la Ley de Reforma Universitaria de 1983 implicaba el traspaso de su propiedad a la Universidad.

Otra parte de los terrenos del INEI fueron para la Seguridad Social y aquella división estuvo en el origen del primer conflicto por la propiedad estalló en 1995, después de que el Ayuntamiento de Gijón, por entonces presidido por Vicente Álvarez Areces, hubiera registrado más de 300.000 metros cuadrados del campus a su nombre. El Ayuntamiento había llegado a un acuerdo con la Tesorería General de la Seguridad Social para hacerse con sus terrenos en la zona de la Laboral, pero registró a su nombre los que el Ministerio de Educación había adscrito a la Universidad. El asunto se aclaró en una reunión entre todas las partes que tuvo lugar en febrero de 1995. Poco después Areces visitaba el campus gijonés con el entonces rector, Santiago Gascón.

El error municipal en la anexión de los terrenos del Campus «fue expresamente reconocido por el entonces Alcalde de Gijón mediante escrito de 15 de febrero de 1995» dirigido al Ministerio, señala la sentencia.

Precisamente, aquella reunión de 1995 y el reconocimiento del alcalde es una de las pruebas que lleva al juez a considerar ahora que faltó «buena fe» en la actuación del anterior gobierno municipal cuando adquirió la parcela de la «Semana Negra» al Principado. Otras pruebas de que el Ayuntamiento no podía desconocer, salvo por una «notoria negligencia» que la parcela que compraba al Principado era de la Universidad es que la misma figuraba entre los terrenos universitarios cuya limpieza asumió el Ayuntamiento en 2001 mediante un convenio con la Universidad. A esto se añade que en febrero de 2009, al mismo tiempo que negociaba con el Principado la permuta de esa parcela, el Ayuntamiento procedía a expropiar a la Universidad terrenos segregados en 2007 de la parcela para urbanizar la Avenida de Albert Einstein. Todo esto lleva al juez a calificar como «evidente» la propiedad de la parcela.

¿Cómo llegó entonces la parcela a manos del Principado? Tras recibir las transferencias de enseñanza no universitaria, el Servicio de Patrimonio del Principado inscribió la finca a su nombre al «considerar de forma unilateral» que seguía formando parte de la Universidad Laboral, argumentando que seguía figurando en el catastro a nombre del Ministerio.

La permuta permuta posterior con el Ayuntamiento fue un canje patrimonial. El jefe de patrimonio del Principado, Javier Uría (arquitecto municipal cuando Areces estaba en la Alcaldía) fue quien suscribió el convenio por parte del Principado. La ex alcaldesa, Paz Fernández Felgueroso lo rubricó por la parte municipal, en la que el área de patrimonio dependía del entonces edil de Hacienda Santiago Martínez Argüelles.