Nicky Villanueva, el concursante gijonés de la sexta edición de «Gran hermano», ha quedado ciego de un ojo como consecuencia de la brutal paliza recibida en el mes de noviembre a las puertas de un bar de la ciudad, tal y como confirmó ayer el propio afectado en conversación telefónica con este periódico. Villanueva comenzó a ser conocido tras participar en la sexta edición del concurso de telerrealidad que emitió la cadena de Mediaset en el año 2004.

Los detalles del suceso aún no han trascendido al estar el caso bajo secreto de sumario, pero Villanueva ha podido adelantar que se vio envuelto en una trifulca cuando trataba de defender a varios de sus amigos, que estaban siendo increpados por otros clientes del establecimiento en el que se encontraban disfrutando de una noche de fiesta.

Nicky Villanueva, que también llegó a participar en el programa «Gran hermano. El reencuentro» que emitió Telecinco, recibió asistencia sanitaria desde un primer momento y no quiso hacer público lo sucedido hasta que uno de sus ex compañeros de «Gran hermano» decidió sacarlo a la luz en uno de los programas vespertinos de la cadena nacional. El gijonés tuvo que permanecer hospitalizado durante más de un mes llegando, al final de su ingreso médico, a perder la visión de un ojo. El proceso judicial continúa ahora en marcha. La víctima ya ha puesto los hechos en conocimiento de sus abogados, Santiago León y Gabriel Cueto.

A lo largo del día de ayer decenas de ciudadanos se solidarizaron con Nicky Villanueva por lo sucedido. Fueron muchos los que colgaron mensajes de apoyo al «gran hermano» en su página oficial en la red social Facebook. El propio Villanueva agradeció al final del día los comentarios que le habían llegado.

El gijonés Nicky Villanueva se mantuvo dentro de la casa de «Gran hermano» durante 81 días en el año de su participación (2004), convirtiéndose de esta manera en el sexto expulsado de su edición del concurso de telerrealidad. Nicky Villanueva, funcionario del Ministerio de Defensa, tenía entonces 30 años de edad.