P. T.

Los afectados por la instalación de una antena de telefonía móvil en el tejado de un bar en el barrio de La Perdiz, en Roces, continúan con su movilización. Ayer volvieron a salir a la calle tras enterarse de que France Telecom, la empresa titular del aparato, ha realizado gestiones para legalizar la estación base que, según ellos, se instaló «sin licencia alguna y a escondidas de los vecinos». Hasta el momento permanece sin entrar en funcionamiento ante las presiones vecinales.

La plataforma de protesta, que incluye a vecinos residentes a escasos metros de la antena, ya ha conseguido una cita con los concejales de Urbanismo, Lucía García, y de Mantenimiento, Manuel Arrieta. Mañana se reunirán con ellos para transmitirles su preocupación. «Ya nos han dicho que cuando tengan sobre la mesa la petición de licencia de la empresa para la antena nos avisarán para que hagamos nuestras alegaciones», explica Ángel Tricas, portavoz de la plataforma, que insiste en que la instalación «no cumple con la ordenanza de Gijón». Por ello, entiende que puede tener efectos graves en la salud de los vecinos.

De momento, la estación de telefonía móvil no ha entrado en funcionamiento, dado que el Ayuntamiento ordenó su paralización ante la falta de licencias. «Si la ponen y nadie dice nada, la echan a andar. Si se quejan, como nosotros, entonces proceden a legalizarla. Nosotros vamos a intentar que no la legalicen y que sea desmantelada», manifiesta Tricas. De momento, hoy se reúnen con el Consistorio.