C. JIMÉNEZ

Ayudar a personas desempleadas, en su misma situación, a través de un foro digital. Tras realizar un curso en el Inem sobre cómo elaborar páginas web, la gijonesa Raquel Díaz decidió aprovechar las ventajas de las nuevas tecnologías para abrir junto a otras personas en su misma situación un espacio para la reincorporación al mercado laboral. Raquel lo hizo del modo que le resultaba más próximo: con trabajos de manualidades, una afición que le permite obtener unos pequeños recursos en tanto que la situación económica mejora. Ideas originales para regalar es el motivo de la página web que inauguró a finales del verano pasado y al proyecto ya se han sumado otras cuatro colaboradoras: María del Carmen García, María Regina García, Sara Blanco y Rocío Díaz.

Los productos elaborados por ellas mismas pueden verse ya en algunos escaparates de la ciudad y parece que comienzan a tener éxito a la vista de las últimas noticias recogidas en la web. «Vendido». «Agotado». «Próximamente volveremos con nuestros bolsos reciclados». Son tan sólo algunos de los anuncios que prueban el acierto de la iniciativa de Raquel y sus cuatro colaboradoras. El único requisito para todas las personas que deseen sumarse al proyecto es que compartan, como su promotora, la afición por los trabajos artesanos. Los interesados podrán ir incorporando, sucesivamente, sus trabajos a la web, sin necesidad de moverse de casa. «Si tienen habilidades para hacer cosas bonitas y, a la vez útiles, nosotros lo ponemos fácil», afirma la gijonesa, que ha encontrado un canal de comercialización muy directo para todas aquellas personas que deseen dar salida a sus creaciones y obtener, de paso, unos pequeños ingresos en tanto que continúan con la búsqueda de empleo.

Cada producto incorpora una o varias imágenes, el nombre del autor y el precio. Con un sencillo clic, los interesados pueden completar su compra sin moverse de casa y recibir la compra, vía postal, también en su domicilio, en pocos días. «Parece que todavía hay algunos que no se atreven mucho a comprar por internet», opina Raquel, que ha optado por cubrir las necesidades de ese sector de población llevando sus diseños y los de sus colaboradoras a establecimientos de la ciudad como Zapatería Vergara, Ana Cabielles Peluquería o Los Zapatos Cantarinos.

Raquel se quedó en el paro hace año y medio, cuando el mercado laboral comenzaba ofrecer los primeros síntomas de una crisis que se agudizaba. Era auxiliar administrativa. Inmediatamente comenzó a buscar alternativas. Tras la formación pertinente de los servicios de Empleo, en apenas dos meses había montado su propia página web donde ahora conviven trabajos de pintura, cuero, mimbre, fieltro y materiales reciclados, porque la preocupación por el medio ambiente es otro de los aspectos que se cuidan mucho en este negocio virtual. Originales posavasos elaborados con corchos de sidra, bolsas de regalo realizadas con papel de periódico y revistas, salvamanteles creados con mapamundis, anillos en espiral realizados con hilo de cobre, broches realizados a base de cremalleras y botones, lámparas bordadas o balancines infantiles son tan sólo algunos ejemplos de la variedad de propuestas de su web. Tampoco faltan los muebles, floreros, botellas o espejos para la casa recuperados de olvido y que, con un toque original por parte de los autores, cobran nueva vida, bien a través de la incorporación de pinturas, decorados con plomo o, simplemente, mediante la restauración de un viejo candelabro en forja.

El proyecto nace de la sensación de la autora de que «todo lo que regalamos siempre es más de lo mismo». «Nuestra idea es conseguir cautivar al agasajado con regalos diferentes y originales hechos cien por cien a mano y, además, que sean útiles», explica Raquel, quien confirma, además, que se encuentran abiertos a «nuevas ideas». Los servilleteros con mensaje, los puzles infantiles e, incluso, zapatos y cinturones, y todo tipo de accesorios para el pelo forman parte de su catálogo de propuestas.

Hoy, viernes, tendrá lugar la presentación pública del proyecto, con la exposición de algunos de los trabajos que pueden verse hasta ahora en la web en el espacio de experimentación artística conocido como La Salita, situado en la calle Manuel Llaneza. Para Raquel y sus colaboradoras será un nuevo escaparate para sus creaciones, y para los gijoneses, un nuevo espacio donde encontrar regalos originales y artesanos, a muy buen precio.