Luján PALACIOS

Cáritas desarrollará en el nuevo equipamiento sociosanitario de El Natahoyo un proyecto de formación laboral relacionado con la hostelería destinado a personas en riesgo de exclusión social. Además, desde las cocinas de este nuevo espacio, que empezará a ser ocupado a finales de este mes por las siete asociaciones a las que el Ayuntamiento ha dado su beneplácito, se prestará servicio de «catering» a los centros sociales de Cáritas en toda Asturias.

Hasta ahora, cada centro preparaba sus propias comidas, pero el objetivo es centralizar la elaboración de los menús en Gijón y distribuirlos al resto de la región. En total, se prevé que se elaboren menús de comida y cena para alrededor de 200 personas al día, con una plantilla de tres personas, y las previsiones de futuro de Cáritas no descartan la posibilidad de prestar servicios de catering a instituciones o particulares, de manera que el servicio siga creciendo.

Asimismo, se unificarán los cursos de formación que actualmente se imparten sobre cuestiones como el cuidado de la ropa, cocina, nutrición y limpieza del hogar. Se trata, como apuntan los responsables del área de Empleo e Inserción Sociolaboral de Cáritas, de alcanzar una formación integral «y profesional» para personas que aspiran a encontrar un empleo en este sector.

En la actualidad, se benefician de estas actuaciones de formación una media de 12 personas al año, y el objetivo es poder organizar dos cursos anuales que den cobertura a 30 personas. En este sentido, Cáritas considera «ideal» el centro de El Natahoyo, porque la falta de espacio venía lastrando sus proyectos y en ocasiones los programas de formación se veían limitados en favor de las labores puramente asistenciales.

Se trata de una iniciativa para extraer el máximo rendimiento a un equipamiento que en principio había sido diseñado para el albergue Covadonga, tal y como recuerdan los gestores de este último servicio. De hecho, para hoy han convocado una comparecencia pública en la que expresarán su «disgusto» ante el hecho de que su traslado a El Natahoyo se haya truncado, en buena medida por la oposición vecinal.

El Ayuntamiento, a su vez, se ha comprometido a realizar varias actuaciones de mejora en el albergue Covadonga que se ejecutarán en dos fases, tal y como avanzó ayer la edil de Asuntos Sociales, Eva Illán. En una primera fase se mejorará el sistema de calefacción y el alicatado del edificio y se adecuará una nueva salida de emergencia, mientras que la segunda parte de los trabajos estaría supeditada al traslado de Proyecto Hombre al Natahoyo. En el espacio que quede libre se podrían reubicar algunas de las dependencias del albergue, si bien «no ocuparían todo el espacio», precisó Illán.

La concejala recalcó que estas reformas serán suficientes para «dotarnos de unos espacios sociales totalmente necesarios para nuestra ciudad», toda vez que «el patronato del albergue Covadonga merece todo el reconocimiento por la incuestionable función que desarrolla». «Creo que entenderán que con esta decisión conseguimos satisfacer las demandas y necesidades de más personas», apostilló la edil.

Además de Cáritas, a lo largo de este mes y principios de marzo se trasladarán al nuevo centro sociosanitario las asociaciones Down del Principado de Asturias, Asociación Parkinson Jovellanos, la Fundación para la Investigación con Células Madre Uterinas (FICEMU), la Asociación de Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA), la Asociación Democrática Asturiana de Familias con Alzheimer (ADAFA) y el Centro Ocupacional de Castiello. En este último podrían tener cabida, según indicó la concejala, entre 10 y 15 usuarios afectados por el ERE del centro especial de empleo Apta.

Eva Illán apuntó ayer que los siete colectivos que pasarán a formar parte del complejo social han sido elegidos para evitar la creación de «guetos sociales», que podrían generar un efecto contraproducente para los usuarios «y por la alarma social que suele generar en los vecinos». Además, puso de relieve los criterios de «rentabilidad social y austeridad».

Muchos otros colectivos de la ciudad demandaban espacio en El Natahoyo, como es el caso de Calor y Café. Ellos tampoco formarán parte del complejo sociosanitario y el Ayuntamiento está a la espera de encontrarles una nueva ubicación. «Será en breve», aseguró Illán.