C. JIMÉNEZ

Un innovador mecanismo separador que sustituye a las tradicionales cuñas de madera para trabajar con grandes losas de piedra natural es el último proyecto del gerente de la empresa Orandi Piedra, Antonio Díaz. Una colaboración con el centro tecnológico Prodintec ha permitido dar solución a uno de los problemas más habituales de la potente industria de la piedra y el mármol de España, el de manejar las losas, sin romperse, durante el proceso de extracción del bloque inicial.

Este innovador producto permitirá sustituir las cuñas de madera utilizadas actualmente para separar las grandes planchas de piedra, aisladas unas de otras en posición vertical, una vez realizados los cortes transversales en los bloques. Estas cuñas presentan una deficiencia importante: si una de ellas se desprende, el conjunto completo de losas puede verse afectado, llegando incluso a soltarse el resto de las cuñas y ocasionando el impacto de unas losas con otras y la consiguiente rotura. «La piedra natural es muy problemática de manejar, es frágil y no se puede dotar de otros elementos para su manipulación», explica Antonio Díaz, quien hace algunos meses comenzó a realizar pruebas de diseño y cálculo para lanzar un producto al mercado. Fue tras recabar los apoyos necesarios a través del programa «Innocámaras», dirigido a pymes y autónomos, que desarrollen actividades industriales, comerciales y de servicios que deseen fomentar sus prácticas en materia de innovación.

En ese proceso fue fundamental el apoyo del centro tecnológico que, a través del área de ingeniería de producto, pusieron en marcha algo tan sencillo como un separador que no se cayera tan fácilmente como las cuñas de madera. El resultado es un producto «ya lanzable» y «listo para ser comercializado», explica Díaz, quien optó por tomar el camino de la innovación en un sector tan tradicional como el de la transformación de la piedra natural, y desarrollar un producto completamente nuevo que supliera sus necesidades. El mecanismo separador propuesto por Orandi, que se fabricará en chapa de acero vulcanizada de un milímetro de espesor, aúna precisión y seguridad, ya que se tiene siempre controlada la distancia entre bloques, puesto que, a diferencia de las cuñas en madera, trabaja de manera uniforme. Su flexibilidad hace que, en caso de desprendimiento de una de las piezas, el resto supla su falta, por el llamado «efecto muelle», aumentando su tamaño hasta cubrir el espacio que ocupaba el separador caído. «Esta pieza aúna elasticidad, fuerza y precio», explica Sergio García Morán, de Prodintec. La labor del centro tecnológico incluía el diseño de la pieza y la simulación de su comportamiento mediante el uso de un software de cálculo por elementos finitos, que permite predecir las deformaciones y tensiones que sufrirá la pieza en funcionamiento, así como la fuerza que producirá para la sujeción de las losas de piedra.

Gracias a esta colaboración, Orandi llevará al mercado un producto innovador sin apenas incurrir en gastos de prototipado (diseño de moldes), puesto que se ha logrado predecir el comportamiento de la pieza virtualmente, siendo tan sólo necesario realizar los moldes finales. «La chapa de acero ni se cae ni se desprende», explica el gerente de la empresa. Orandi lleva seis meses en el mercado y tiene presencia en la zona de Alicante, Almería o Murcia, donde se fabrican los bloques de mármol, además de Galicia y Madrid, donde mandan los trabajos en granito.