El artista leonés Javier Iriso y el catalán Pedro Pina ofrecieron ayer en el Museo Barjola dos sesiones de arte sonoro y visual posdigital dentro del Festival «Trendelenburg 2.3», una cita para convertir la tecnología digital «en un valor emocional en las actuaciones en directo».

En la jornada de ayer también tuvo lugar una visita guiada y gratuita a Laboral Centro de Arte, para conocer la instalación del japonés Ryoji Ikeda, así como una mesa redonda sobre el arte experimental hoy en día, sesiones de «playtime» y de «workshop», con las nuevas herramientas de creación artística.