R. G.

Los dos conductores vecinos de Gijón procesados por el atropello múltiple que tuvo lugar hace ahora dos años y en el que fallecieron dos septuagenarias vecinas de Pumarín -Isabel Sánchez Friera y Maribel Sánchez- se enfrentarán a una pena máxima de cuatro años de cárcel. El Juzgado de lo penal ha abierto procedimiento contra ellos por un delito de homicidio por imprudencia castigado en el Código Penal español con condenas de uno a cuatro años de prisión.

El suceso tuvo lugar el 8 de marzo de 2010. Las dos fallecidas esperaban entonces junto a otras tres personas en un paso de peatones situado a la altura de la calle Cataluña que fue invadido por una furgoneta que, previamente, había sufrido el impacto de otro vehículo que tuvo que hacer una maniobra brusca al encontrarse un coche parado en un semáforo. La Policía arrestó entonces a los dos conductores, que serán procesados previsiblemente antes del verano, según el representante legal de la acusación particular. El proceso penal se dilató en el tiempo debido a las complicaciones médicas que sufrió una de las heridas en el accidente.