R. G.

El Juzgado de instrucción que se encuentra de guardia esta semana decretó el pasado miércoles el ingreso en prisión de un joven gijonés de 19 años de edad con 12 arrestos policiales en su historial delictivo acusado en esta ocasión de incumplir varios llamamientos judiciales y de violar la orden de alejamiento que le impedía acercarse a su ex novia, una menor, de 17 años de edad, también vecina de Gijón. La Policía Nacional descubrió a la menor cuando caminaba por la calle al mediodía del pasado lunes con el acusado, ampliamente conocido por los funcionarios policiales de la Comisaría.

Los propios padres de la chica habían puesto previamente en conocimiento de los agentes policiales el comportamiento agresivo que el detenido mantenía con su hija. La orden de alejamiento que el detenido tenía en vigor con su ex novia no era la única impuesta por los Juzgados de lo penal de Gijón, que impidieron además durante los últimos meses que el presunto delincuente se acercara a sus padres, a sus hermanos y a dos de sus ex parejas por su «extremo carácter violento e impulsivo». Los más allegados al gijonés denunciaron a este joven hasta en diez ocasiones por delitos de malos tratos ejercidos normalmente contra ex parejas sentimentales.

La Policía Nacional elaboró tras el último arresto un atestado en torno a la situación penal del acusado que fue enviado al Juzgado de instrucción que se encontraba realizando las labores de guardia. El magistrado titular de esta sala dispuso el ingreso en prisión del joven el pasado miércoles tras oír su versión de lo sucedido.