J. J.

La comisión electoral del Grupo Covadonga formada por Luis Roza, María Luisa Fernández y Rosa María Rueda ha decidido aceptar la impugnación presentada por el socio Mariano de la Puente Bordonaba y ha suspendido las elecciones a la presidencia del club gijonés, previstas para el próximo día 24, hasta que se elabore un nuevo calendario.

De la Puente presentó una impugnación que no afectaba a ninguna de las dos candidaturas, sino al proceder de la propia comisión electoral. Este socio consideraba que había incumplido lo recogido en el artículo 54 del reglamento de Régimen Interno en el que se indica que la comisión deberá facilitar a los aspirantes a candidatos impresos para la recogida de avales «hasta un número superior al diez por ciento del mínimo de firmas precisas». En el caso de unas elecciones este número de avales es de 300, por lo que el máximo de impresos debía de ser de 330. Sin embargo la comisión electoral entregó un número ilimitado a cada de ellos como lo demuestra que uno de los aspirantes, José Antonio Mateos, validó 658 avales, y el otro, Enrique Tamargo, 1.390, circunstancia que motivó la impugnación.

Tras conocerla, José Antonio Mateos presentó un escrito en el que reconocía que el impugnante tenía razón. Tanto Mateos como Tamargo y la propia comisión estaban abiertos a la posibilidad de alcanzar un consenso y que el proceso siguiera adelante, pero finalmente decidieron retrotraer el proceso al momento de entrega de avales por parte de la comisión electoral, ante la posibilidad de que las elecciones fueran impugnadas judicialmente, lo que conllevaría una situación que ninguna de las partes quiere.

La decisión de suspender el proceso electoral fue tomada tras más de dos horas y media de reuniones en las que participaron representantes de ambas candidaturas. La comisión electoral tenía previsto reunirse en los próximos días para establecer el nuevo calendario en consenso con los dos aspirantes a candidatos.

Sin embargo, todo hace indicar que este trámite no puede llevarse a cabo por consenso de las partes, sino que sería necesaria la convocatoria de una nueva asamblea de socios, ya que los estatutos vigentes establecen en su artículo 27.1 que «La asamblea fija las fechas del último día de presentación de candidatos, el plazo para su impugnación, la de la proclamación de candidatos, la de inicio y fin de campaña electoral, la de votación, el plazo para impugnar los resultados y la de toma de posesión del presidente electo». En los estatutos no está contemplado en ningún apartado la circunstancia que se ha dado en esta ocasión, por lo que cualquier interpretación, aunque ésta sea consensuada por los posibles candidatos, quedaría expuesta a una nueva impugnación.

Alguno de los redactores de los estatutos vigentes consultado por LA NUEVA ESPAÑA se mostró rotundo al considerar que la comisión electoral no tiene potestad para rehacer el calendario y que el nuevo debe de ser aprobado por la asamblea de socios.

La suspensión de un calendario electoral ya en marcha no se había producido hasta ahora en ninguna de las elecciones llevadas a cabo anteriormente en el club gijonés.

Esta circunstancia no prevista por ambos candidatos va a suponer la paralización de la presentación de los programas de ambos. José Antonio Mateos tenía previsto darlo a conocer así como a los componentes de su candidatura, mañana sábado.