R. V.

Carlos Rubiera, presidente del teatro Jovellanos, asumía ayer que «es posible» que la opción de dar un contrato de alta dirección a Nacho Carballo (su antecesor en la dirección del Festival de Cine, José Luis Cienfuegos, tenía un contrato mercantil) traiga consigo el coste añadido para el teatro del pago de su Seguridad Social, pero consideraba «una gran desfachatez» que la denuncia pública de esa situación hubiera partido de la concejala socialista y ex gerente del Jovellanos Carmen Veiga, a quien considera desautorizada para «acusar a otros de malgastar el dinero cuando ella tiene un larguísimo historial de ineficacia».

Rubiera incluyó en ese listado de mala gestión socialista del teatro que en su primera reunión con Cienfuegos le hubiera presentado facturas sin pagar de la anterior edición del Festival de Cine por una cuantía de 270.000 euros o que el gobierno de Foro tuviera que hacer frente a una deuda acumulada de un millón de euros en el Jovellanos. Para Rubiera, la actitud de Veiga es de una «caradura impresionante», aunque se mostró insensible a sus críticas porque «no tiene ninguna credibilidad, que diga lo que quiera».

Carmen Veiga había cuantificado en unos 13.000 euros el coste añadido para las arcas del Jovellanos del cambio de modelo de contrato en la dirección del Festival de Cine, pese a que Carballo siguiese cobrando los 40.000 euros que recibía Cienfuegos en su contrato mercantil. «Yo no pongo en cuestión lo que cobran, yo lo que cuestiono es que el concejal nos mintió en el Pleno cuando dijo que el cambio no iba a costar más», remataba la edil socialista ayer. «Me parece muy fuerte mentir así en un Pleno, es un poco cutre», señaló la concejala del Grupo Socialista.