Las únicas bonificaciones para incentivar tráficos y servicios marítimos que podrá aplicar El Musel este año, según se recoge en los Presupuestos Generales del Estado, tendrán obligatoriamente que ir dirigidas al tráfico de contenedores (30% al buque y 30% a la mercancía) y a la autopista del mar (40% al buque y 35% a la mercancía).

En el apartado de las bonificaciones es donde se pone de manifiesto más claramente la desventaja del puerto de Gijón en relación con sus competidores más cercanos. Así, el puerto de A Coruña tendrá bonificaciones al buque, que alcanzarán un 40% en pasaje, contenedores y tráfico ro-ro, y del 20% en frutas y hortalizas. Respecto a la mercancía, A Coruña bonificará con un 40% el clínker, con un 35% el mármol y el papel y con un 30% los productos siderúrgicos.

Resulta también evidente esa desventaja si se compara con las bonificaciones aprobadas para el puerto de Bilbao, que podrá aplicarlas no sólo a buques y mercancías sino también a espacios portuarios, en este último caso de hasta el 10% en contenedores y graneles sólidos. Las mercancías que podrán ser bonificadas por el puerto bilbaíno son: contenedores (40%), vehículos (40%), ro-ro (25%), caucho y papel (18%) y productos siderúrgicos (15%). Santander, por su parte, bonificará con un 40% la mercancía de contenedores, ropa y graneles, con un 20% el tráfico ro-ro y con un 10% vehículos, pasta de papel y cereales.