R. G. / R. V.

El Juzgado de instrucción que investiga la pelea que tuvo lugar el pasado domingo en la Residencia Mixta de Pumarín ha impuesto una orden de alejamiento contra A. F. C., el interno de 87 años de edad acusado de provocar la trifulca que se saldó con seis ancianos heridos. Cuatro de estos residentes tuvieron que ser conducidos a centros hospitalarios de la ciudad. Los responsables del centro social gijonés trasladaron ayer al acusado a una nueva residencia cumpliendo de esta manera la orden judicial.

El suceso que ahora se investiga judicialmente tuvo lugar alrededor de las diez de la mañana. El interno, de 87 años de edad que figura como principal acusado de la trifulca golpeó entonces a su víctima, un hombre de 72 años, con una botella de vino que le fracturó en la cabeza supuestamente después de discutir acerca de un supuesto robo de comida que había tenido lugar días antes. Hasta cuatro internos de la residencia mixta de Pumarín intentaron mediar en la trifulca utilizando cubiertos del desayuno y hasta sillas como armas.

Los responsables de los Establecimientos Residenciales del Principado y los directivos de la Residencia Mixta de Pumarín se reunirán hoy con los representantes de los trabajadores del centro social para analizar lo sucedido. El Gobierno regional prometió tomar medidas urgentes para evitar que sucesos como éste «se vuelvan a repetir» tras conocer los hechos.

El incidente ha llegado también al debate político municipal con una pregunta del PP a la concejala de Bienestar Social, Eva María Illán, que se tramitó ayer en la comisión de Políticas Integrales. El PP quiere tener acceso a toda la información que sobre el hecho se tenga en el Ayuntamiento, para analizar posibles problemas de seguridad. Desde el PP se recuerda que no es el primer incidente: ni entre usuarios ni con el personal.