P. T.

Cerca de 200 tejos centenarios, según cuenta Ignacio Abella, resisten el paso de los tiempos en Asturias. Algunos de ellos, de gran simbolismo, junto a iglesias, donde el pueblo tenía su lugar de reunión y toma de decisiones. Ayer se abrieron en el Jardín Botánico las «Jornadas sobre gestión y conservación de tejos», que inauguraron Carmen Moriyón, alcaldesa de Gijón, y Emilio Marcos Vallaure, titular de la Consejería de Cultura y Deportes, que recientemente dio luz verde a la protección de doce tejos de la región con categoría de «sitio histórico». «Vi caer muchos tejos», proclamó Vallaure, que añadió después que «se me olvidan los que vi caer y me alegro por los que se van a conservar». Moriyón, por su parte, aseguró que en Gijón «la conservación de los árboles es una prioridad». Uno de los tejos declarados como «sitio histórico» es el situado junto a la iglesia de Cenero.