R. GARCÍA
Un gijonés de 30 años de edad, Enrique Lorenzo Yuste, falleció el pasado lunes en un accidente de tráfico que tuvo lugar alrededor de las once menos diez de la noche en el kilómetro 22 de la carretera comarcal 619, en la provincia de Burgos. El suceso se produjo a escasos metros de la localidad en la que desempeñaba su trabajo el gijonés, agente de la Guardia Civil destinado en el cuartel de La Horra. En el momento del suceso el conductor volvía a su trabajo después de pasar unos días de vacaciones con su familia en Gijón.
El agente colisionó frontalmente con un camión que se encontraba realizando un cambio de sentido en una zona de cambio de rasante, tal y como informaron ayer a este periódico fuentes cercanas a la investigación del caso. El coche en el que viajaba Enrique Lorenzo quedó atrapado bajo el camión. Los Bomberos y los servicios de emergencias no pudieron hacer nada para salvarle la vida al funcionario. El gijonés, que llevaba ya un tiempo destinado en el cuartel de La Horra, falleció en el acto.
El difunto tenía una hija, Iria Lorenzo Gutiérrez. La celebración de la Palabra en homenaje al gijonés tendrá lugar a las cinco de la tarde de hoy, miércoles, en el tanatorio de Cabueñes. Tras el oficio, los restos mortales de Enrique Lorenzo serán incinerados.
