R. GARCÍA

La juez del Juzgado de instrucción número 2 de Gijón, Belén García, dejó en la mañana de ayer en libertad con cargos al ex concursante de «Gran hermano» Arístides Alonso, que fue detenido el pasado lunes en Bilbao acusado de planificar el asalto al bingo Sporting que tuvo lugar en febrero del año 2011. Tres atracadores encapuchados amordazaron entonces a los trabajadores del establecimiento gijonés situado en la avenida de Portugal y los maniataron, logrando huir de la zona con un botín de más de 100.000 euros. El cabecilla de este grupo de delincuentes, que también fue detenido el lunes en Bilbao, ingresó ayer en prisión. La Policía ha detenido ya en los últimos meses al menos a cuatro personas relacionadas con este asalto. Las investigaciones, que se encuentran bajo secreto de sumario, continúan abiertas, por lo que no se descarta que en los próximos días se pudieran producir nuevos arrestos.

La magistrada encargada de la investigación del caso considera a Arístides Alonso -un bilbaíno que llegó a pagar casi 70.000 euros en una subasta para poder entrar en la casa de «Gran hermano»- responsable de un delito de robo con violencia y de tres delitos de detención ilegal. El reo, que fue trasladado a la Comisaría de El Natahoyo de Gijón desde su ciudad natal, pasó un reconocimiento médico nada más llegar a Asturias. Los agentes de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Comisaría de El Natahoyo aseguran que Alonso fue el responsable de la planificación del atraco. El concursante de «Gran hermano» preparó el golpe avisando a los encargados de su ejecución de los horarios de apertura del bingo, del número de trabajadores que había en el local por las mañanas y de la hora en la que podían conseguir un botín más elevado. Arístides Alonso consiguió esta información gracias a sus contactos con vínculos delincuenciales que operan en todo el norte de España, según pudo saber ayer este periódico.

El ex concursante de «Gran hermano» abandonó los Juzgados de Gijón alrededor de las dos y media de la tarde de ayer tras prestar declaración. Una mujer a bordo de un coche negro recogió al televisivo concursante en los calabozos de los Juzgados de la ciudad. El presunto delincuente había solicitado poco antes que se permitiera la entrada del turismo en la sede judicial. Un privilegio que se concede en muy contadas ocasiones y que ayer se le permitió a Arístides Alonso para que pudiera evitar la presencia de los periodistas que a esas horas se encontraban en las inmediaciones de los Juzgados esperando la salida del acusado.

La Policía Nacional continúa ahora con las investigaciones con las que se pretende capturar al resto de los delincuentes que aún no han podido ser arrestados. Los agentes comenzaron los trabajos en febrero de 2011, llegando a solicitar pocos meses después la colaboración ciudadana para poder identificar a los atracadores. La Policía investiga ahora la procedencia del dinero que Arístides Alonso pagó para entrar en «Gran hermano», 69.100 euros. A pesar de que el concursante que participó en la subasta pública de una plaza para el programa de telerrealidad aseguró en su momento que el dinero se lo habían donado sus familiares, los agentes -que ya le seguían entonces la pista al acusado-, aún no han confirmado este extremo.