Alumna del IES Jimena, de las mejores notas en la PAU

Antonio RICO

Se puede alcanzar la fama encerrándose con unos desconocidos en la casa de «Gran Hermano» o sacando matrícula de honor en bachillerato y una nota de 13,8 en la PAU. Julia Leonardo pertenece a la segunda clase. Esta estudiante de Humanidades en el IES «Doña Jimena» sabe que su fama es efímera pero, a diferencia de la fama de los concursantes de «Gran Hermano», tiene más sabor. Después de una brillante trayectoria académica, tiene decidido estudiar Lengua Española y sus Literaturas en la Universidad de Oviedo. En los últimos días se ha hartado de dar explicaciones sobre esa decisión que, para algunos, tal parece que fuera un desperdicio. Los que así opinan han dado en hueso: «no me parece que las humanidades sean menos importantes que otros campos del saber», sostiene ella.

-Ya le habrán preguntado muchas veces por qué, con esa estupenda nota en PAU, ha decidido estudiar una carrera de Humanidades. ¿Tiene preparada una buena respuesta?

-Cuando me preguntan sólo puedo decir que me gustan las Humanidades, aunque las matemáticas tampoco se me daban mal. No entiendo por qué mucha gente se sorprende por mi decisión de estudiar una Filología, porque no me parece que las Humanidades sean menos interesantes o menos importantes que otros campos del saber. Nadie le pide a un futuro estudiante de Derecho o de Ingeniería que se justifique, pero parece que los que elegimos el camino de las llamadas «letras» sí tenemos que hacerlo.

-Ha estudiado en Bachillerato historia, filosofía, arte, griego, latín, lengua? ¿Está preparada para entender el mundo y, lo que es más importante, transformarlo?

-Todas esas asignaturas dan una cultura que te permite entender aspectos del mundo que desbordan el ámbito de la física o de la química, que también son disciplinas fundamentales. En mi caso, la historia, el arte o el griego clásico han conseguido no sólo que entienda mejor el mundo en el que vivo, sino que me han enseñado a disfrutarlo. En cuanto a transformar el mundo? No parece que estemos en el mejor momento para cambiar las cosas, pero creo que saber griego clásico no las empeorará.

-Ante una crisis que nadie supo predecir y nadie parece saber controlar su opinión es, por tanto, tan válida como la cualquiera, e incluso puede que más. ¿Cuáles serían sus soluciones para salir de este agujero en el que vivimos?

-La culpa de la actual crisis no es de los que más la sufren. Gente muy poderosa se ha comportado de forma irresponsable, y ahora resulta que el remedio está en recortar la inversión en sanidad, educación y otros servicios esenciales. No tengo recetas mágicas para acabar con la crisis, pero tampoco tengo muchos motivos para confiar en las recetas de los que toman las decisiones. Diría que no hay más remedio que apretarse el cinturón, pero me gustaría que fuera de forma proporcional.

-¿Qué diría a un joven que duda estudiar una carrera de Humanidades por miedo a no encontrar trabajo?

-En primer lugar, creo que eso de que los estudios de Humanidades condenan al paro es una afirmación injusta o, por lo menos, imprecisa. ¿Hay más paro entre los filósofos que entre los abogados? Asumo que nuestra generación tendrá grandes dificultades para encontrar trabajo digno, pero no es un buen comienzo elegir unos estudios sólo porque alguien ha dicho que tienen más «salidas». A lo mejor queda un poco cursi, pero yo recomendaría estudiar lo que nos hace felices. He recorrido un largo camino desde mi colegio en Pola de Laviana hasta mi graduación en el «Doña Jimena», y estoy orgullosa de los centros públicos en los que me formé, de mis profesores y de mis compañeros. He aprendido mucho y he sido muy feliz, y quiero seguir aprendiendo y siendo feliz. Por eso estudiaré Lengua Española.

-¿Pensó en reclamar ese 9,5 en latín, para que no desentone con el 10 que han sacado en todas las demás asignaturas de PAU?

-No, y si lo hubiera hecho creo que no cumpliría con el imperativo categórico de Kant, porque reconozco que tuve un pequeño fallo en el examen y no merezco el 10.

-Para acabar con unas recomendaciones para el verano. ¿Qué libro, película, canción o viaje sugiere a los que, como es su caso, están a punto de empezar sus estudios universitarios?

-Un libro: «La ladrona de libros», de Markus Zusak, acerca del poder de la palabra y de la lectura. Una película: «Vacaciones en Roma», con una maravillosa Audrey Hepburn. Una canción: «Riazor», de Amaral. Y un viaje: Roma.