C. JIMÉNEZ

Con una reserva cerrada con siete días de antelación, los empleados del Parque Tecnológico tienen desde ayer a su disposición un vehículo eléctrico que cuenta con la autonomía suficiente para recorrer 150 kilómetros de distancia. El coste de este nuevo sistema de movilidad resulta de lo «más simbólico», según los responsables del área empresarial de Cabueñes. Los arrendatarios únicamente deberán abonar cinco euros por cada hora de uso del coche. ¿El único requisito? Disponer de tarjeta ciudadana para gestionar las reservas. «El objetivo es fomentar la movilidad sostenible», explica Bernardo Veira, director gerente del Centro Municipal de Empresas que acaba de adquirir uno de estos vehículos para los empleados del Parque Tecnológico. Pero también se ha pensado en desplegar la iniciativa en este espacio «para contener el problema de aparcamiento». A diario entran entre 1.500 y 1.600 vehículos. De las 1.800 personas que trabajan en el Parque apenas llega al centenar quienes utilizan transporte público.

Para zanjar los problemas derivados de este aluvión de vehículos que acompañan desde hace varios años al área empresarial, sus responsables se han adherido al proyecto municipal de coche compartido («car sharing» en su denominación anglosajona). De hecho, el Ayuntamiento de Gijón ha sido una de las flotas pioneras en implantar este sistema - con 54 vehículos, ocho de ellos eléctricos para dar servicio a más de 300 empleados - , y que gracias a esta medida ha ahorrado hasta el momento más de 400.000 euros.

Los nuevos usuarios del Parque Tecnológico pueden realizar sus reservas a través de la web www.gijonsemueve.com, que integra también un centro de atención a consultas e incidencias sobre el vehículo adquirido, marca Peugeot Ion, que alcanza una velocidad máxima de 130 kilómetros por hora, con de 66 caballos de potencia. «Tiene muchas ventajas. El combustible lo paga el Ayuntamiento», sostiene Bernardo Veira, en referencia a la gratuidad de las recargas, pues no supone ningún coste adicional para el usuario. «Y tampoco hay que preocuparse por el aparcamiento», indica, pues este coche tendría casi en exclusiva la utilización de las plazas habilitadas en el entorno de la plaza Mayor, El Molinón, el parque de la Fábrica de Gas y la inaugurada ayer en el Parque Tecnológico. El responsable del proyecto «car sharing» en el Ayuntamiento, Ignacio Díaz, añade como principales ventajas el bajo coste que acompaña a la movilidad eléctrica. Cien kilómetros con un coche eléctrico cuestan 0.82 euros. Con un vehículo de combustión rondaría los 10 euros al precio actual de los combustibles. «Si se realizan 10.000 kilómetros al año el ahorro es de 646 euros», apunta. La reducción de las emisiones de dióxido de carbono también es importante pues sólo con el nivel de uso actual de la flota se ha rebajado en una tonelada de CO2 al mes.