C. JIMÉNEZ

Es previsible que en las próximas semanas la Universidad de Oviedo abandone el espacio reservado en el Parque Científico y Tecnológico de Gijón para instalar el centro de control de plataforma marina. Aunque nada han concretado aún a los responsables de las residencias empresariales donde estaba previsto realizar la instalación, la oficina habilitada en su momento para estos usos resultaría innecesaria en caso de que la institución académica deje de ser la entidad impulsora del proyecto.

Desde la empresa privada opinan que no se valora la vertiente tecnológica del campus gijonés y juzgan de «muy mal gusto» que el rector hubiera acusado en los últimos tiempos al sector privado de «no tener mucho interés en colaborar» para que la estación marina saliera adelante. Asimismo, recuerdan a Gotor y su equipo que «se les ayudó a lograr los avales pero no hubo posibilidad de dialogar». Incluso, continúan, «se les regalaron proyectos y se lograron un montón de cosas muy difíciles». Por ello, advierten de que si las empresas no logran tener en Asturias una instalación singular para probar la tecnología «off shore» durante al menos 8.000 horas (un año completo) se habrá perdido una oportunidad importante.