C. JIMÉNEZ
Una camilla ecológica, ergonómica y económica. Éstas son las premisas sobre las que trabajarán durante los próximos seis meses tres alumnos de la Escuela Politécnica que asumirán el encargo de la Hermandad de Donantes de Sangre de Gijón, gracias a unas becas de la empresa Fluor, con una dotación global de 1.400 euros, para renovar el actual mobiliario de la Hermandad para recibir a los «brazos» solidarios.
El proyecto arrancó hace varios meses con el inicio de los primeros bocetos por parte de los profesores del grupo de sistemas biomecánicos de la Universidad, pero la participación del grupo empresarial les animó a dejar en manos de los estudiantes el diseño final. «Hay muchos centros comunitarios que necesitan de esa camilla, las que tenemos son del año 1985», apuntó el presidente de la Hermandad de Donantes de Sangre de Gijón, Faustino Valdés. La petición sobre la mesa era clara: aligerar los materiales actuales que hacen muy pesado el traslado, eliminar la electrónica para los movimientos de incorporación del donante y facilitar el desplazamiento con los equipos a cualquier lugar. Los profesores Rafael Álvarez Cuervo y Jorge Roces, del grupo de sistemas biomecánicos, anunciaron que se tratará de buscar un diseño «desenfadado» donde el propio peso del cuerpo genere la inercia de bajada de la camilla y que resulte práctica y ergonómica para los usuarios. Los primeros resultados se verán en julio. El delegado de Fluor en Asturias, Juan Vicente Piñera, y el jefe de operaciones, Alejandro Castro, señalaron que a la aportación económica de la empresa se sumará la supervisión periódica del proyecto «para aportar nuestra experiencia en el mundo del diseño». Los profesores animaron a todos los alumnos de Ingeniería con interés por el diseño asistido por ordenador a participar de un proyecto que se presenta más como una posibilidad de conectar con el mundo empresarial que como un examen. «No tratamos de evaluar a nadie, sino de que los estudiantes puedan tener una primera experiencia profesional», apuntaron.
De hecho un porcentaje alto de los trabajadores de Fluor en Asturias han salido de la Politécnica. «El jueves firmamos el contrato con uno de los galardonados en los premios "Ingeniería en positivo"», anunciaron desde la empresa. El presidente del colectivo gijonés de donantes de sangre cree que «habrá mucho beneficiario de esta labor altruista del alumnado».
