El gobierno local apuesta por el "nuevo Urbanismo", que la alcaldesa entiende como "la voluntad de abrir cauces de participación ciudadana más allá de los que marca la ley" para cualquier revisión urbanística. El Ayuntamiento dará ese paso más allá tomando como punto de partida el prediagnóstico que el Colegio Oficial de Arquitectos de Asturias ha hecho de la situación actual de la ciudad. Documento que ayer se presentaba públicamente como "algo inédito en la región" y "muy poco habitual en España".

La experiencia más próxima es la de Bilbao, cuyo ejemplo han tratado de seguir los arquitectos asturianos para cumplir con el encargo que el equipo de gobierno de Carmen Moriyón les hacía en el mes de julio. A diferencia de la capital vizcaína, que dedicó dos años y 500.000 euros al trabajo de prediagnóstico, en Gijón ha tenido que realizarse en tres meses y con apenas 18.000 euros de presupuesto (28 veces menor). De ahí que ayer se insistiese en el esfuerzo "ingente y desinteresado" de los 25 colegiados que intervinieron en el documento.

"Al ser algo novedoso, teníamos muchos temores, pero el resultado no ha podido ser mejor. Por encima de cualquier opinión interesada, han puesto sobre la mesa las cuestiones más importantes que han de tenerse en cuenta en el futuro planeamiento", apuntó la concejala de Urbanismo, Lucía García Serrano. El prediagnóstico de los arquitectos recoge 100 "puntos calientes", que servirán de base para la consulta ciudadana que precederá a la revisión del Plan General de Ordenación (PGO). El equipo de García Serrano prepara un formulario con preguntas inspiradas en el documento y opciones de respuesta "tipo test", aunque "dejaremos un pequeño espacio para observaciones", explicó.

Dicho formulario se tasladará a los grupos políticos de la oposición para que hagan sus aportaciones, ya que "queremos conseguir el mayor consenso posible". Acto seguido, el Ayuntamiento difundirá su contenido entre los consejos de distrito y los distintos colectivos sociales del municipio, para poder, así, iniciar la consulta "a finales de noviembre o principios de diciembre". Los ciudadanos tendrán la posibilidad de rellenar el formulario -que podría incluir hasta un centenar de cuestiones- vía Internet, a través de la página web del Ayuntamiento.

La Concejalía de Urbanismo tendrá que trabajar conjuntamente con Participación Ciudadana, el departamento de informática y la unidad de información corporativa del Ayuntamiento para gestionar el proceso y elaborar, en función de las respuestas de los ciudadanos, lo que se conoce como diagnóstico participado. La intención del equipo de gobierno de Foro Asturias es "encadenar este diagnóstico con el documento de prioridades" del futuro PGO, cuya redacción todavía se encuentra en fase de licitación.

Eso implica, según la concejala de Urbanismo, "adjudicar la revisión del Plan General en enero y concluir el proceso de consulta en febrero como máximo". El documento de prioridades determinará cuáles son las necesidades del concejo y, por tanto, será crucial a la hora de decidir el modelo territorial de Gijón y su futuro diseño urbanístico. "Seremos diligentes para que la participación ciudadana se desarrolle con fluidez", aseguró la Alcaldesa.

La presentación de ayer coincide con las críticas de la patronal de la construcción al prediagnóstico de los arquitectos y a la "inacción municipal" en materia urbanística. Pero la forista Carmen Moriyón no quiso ayer entrar al trapo: "Trabajamos para lo que sea mejor para Gijón, no para acallar críticas". Incluso interrumpió a la concejala de Urbanismo cuando se disponía a opinar sobre la postura de los constructores. Lucía García Serrano sólo alcanzó a decir que "los plazos no siempre dependen del Ayuntamiento" y la revisión del PGO "es nuestra máxima prioridad".

La decisión de redactar un nuevo Plan General obedece a la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Asturias que, el pasado mes de febrero, anuló la normativa urbanística que estaba vigente desde 2011. El gobierno de Foro considera que la única forma de devolverle la normalidad jurídica al Urbanismo gijonés es tramitando desde cero un nuevo planeamiento. El Colegio de Arquitectos, representado ayer por su decano y su vicedecana, Alfonso Toribio y Sonia Puente, respectivamente, quiso dejar claro que "nuestro prediagnóstico no opina ni hace valoraciones jurídicas ni aporta fórmulas mágicas, porque no nos compete a nosotros dar soluciones" a esta situación.