Pablo TUÑÓN
El paseante que se para a observar el escaparate es el protagonista de una película, al que observan varios espectadores "gafotas". Con este concepto, una óptica se ha alzado ganadora del concurso "Comercios de película", organizado por la Unión de Comerciantes de Gijón en colaboración con el Festival Internacional de Cine para premiar el mejor escaparate. "No queríamos reflejar una película, nada en concreto, sino algo genérico del Festival. Y para ello nos dio mucho juego el logotipo, que es un ojo, al combinarlo con las gafas, nuestro principal producto", explicaban los responsables del negocio ganador, situado en Juan Alvargonzález.
En el escaparate de la tienda, de la cadena Opticalia, todas las gafas se convierten en espectadores de un cine, al tener detrás de cada cristal el ojo que sirve de logo al Festival gijonés. Para ambientar la sala de cine, una cortina en forma de telón rojo, cuero dispuesto en forma de butacas para las gafas, palomitas y refrescos. Además de un proyector de cine apuntando al viandante que se para a ver el escaparate y que se convierte en el "protagonista de la película".
Miguel Ángel Souto, propietario de la óptica, estaba ayer contento con el éxito del escaparate, diseñado por su pareja, Maxi Bobes. "Fue su idea. Ella se encarga siempre del escaparate", confesaba ayer Souto. Ambos se presentaban por primera vez al concurso de escaparates "Comercios de película". Como premio, se llevaron una entrada para la gala de clausura del certamen cinematográfico, el ágape posterior y la fiesta en el Casino de Asturias.
"Lo que realmente buscábamos era publicidad con el concurso. De hecho, nos extrañó que no tuviese mucha participación, porque en Gijón hay muchos comercios y, aunque sólo sea la segunda edición, sirve para promocionarte en estos tiempos", señalaba ayer Maxi Bobes.
Además de la óptica de la calle Juan Alvargonzález, en el concurso de escaparates tuvo una mención especial la peluquería Olga y Javier. El ambiente del Festival se extiende más allá de las salas de cine.
