El director general de Justicia del Principado de Asturias, José Luis Villaverde, asegura que el gobierno regional ya trabaja para solucionar las deficiencias que los funcionarios de su área han detectado en el sistema de climatización del nuevo Palacio de Justicia de Gijón, recientemente inaugurado. Los sindicatos aseguran que la automatización de este servicio hace que se hayan tenido que llegar a suspender juicios porque "se ponen altos los termostatos para que no pasen frío quienes trabajan frente a la puerta", eso hace que en unas salas se rozan los 30 grados en otras la temperatura no llega a los 15. "Las condiciones de las instalaciones son óptimas. Otra cosa es que ahora tengamos que poner una pantalla de calor en la entrada para que los funcionarios que se encuentran en esta zona trabajen bien", contaba ayer el propio Villaverde durante una visita al Palacio de La Bohemia.

Lo que el director general de Justicia no concretó es la solución que el Principado adoptará con respecto al otro problema denunciado por los representantes de los trabajadores: el derroche de energía que se produce al no apagarse nunca las luces de los pasillos principales del Palacio de Justicia, que permanecen encendidas incluso los festivos y los fines de semana. "Eso corresponde a la dirección de patrimonio", argumentó Villa ayer durante una visita a las nuevas oficinas de la Servicio Interdisciplinar de Atención de Drogodependencias en la que también estuvo presente el director general de salud pública, Julio Bruno, quién destacó la importancia de un servicio "fundamental para nuestra comunidad y para la reinserción de los drogodependientes" y cuya gestión ya estudia asumir el gobierno regional. "El SIAD se creó en el 2003 gracias a un convenio con el Consejo General del Poder Judicial y se hizo así porque entonces no había dirección general de Justicia pero ahora ya lo podemos gestionar nosotros", argumentaba Bruno.