Entre pancartas de protesta y consignas de rechazo a la política de cierres sistemáticos de instalaciones en la Universidad de Oviedo, el Vicerrectorado de Investigación y Campus de Excelencia Internacional oficializó ayer el cierre de la biblioteca del edificio polivalente de la Escuela Politécnica de Ingeniería de Gijón sin más explicaciones que las aportadas en los carteles informativos instalados en los últimos días para proceder a la clausura definitiva de estas instalaciones a fecha de 31 de enero. La acción derivó en un acto espontáneo de protesta de los alumnos, convocada a través de las redes sociales y que reunió ayer al mediodía a las puertas del centro gijonés a medio centenar de chavales con carteles donde podría leerse "Escuela sin biblioteca es igual a Universidad sin excelencia" y "Fuera las empresas de la Universidad" y "Sin becas, sin fotocopiadora, sin calefacción, sin biblioteca". El malestar desembocó ya por la tarde en la ocupación de ese espacio por parte de los estudiantes, que se reunieron después con la vicerrectora de Investigación y Campus de Excelencia Internacional, Paz Suárez Rendueles, y tres miembros del equipo de dirección de la Escuela Politécnica, entre ellos, su máximo responsable, Hilario López.

Los alumnos se quejan de que en los últimos meses se suceden los cierres y restricciones de diferentes equipamientos universitarios sin ningún tipo de explicación. En el caso de la biblioteca del edificio polivalente el malestar se hace, si cabe, aún mayor, pues los integrantes de la asamblea de Viesques rechazan los usos que la Universidad pretende dar al espacio que hasta ayer servicio como sala de consulta y préstamo y que fue vaciado de todo contenido en las primeras horas de la mañana. Está previsto que en próximas fechas sea ocupado para su uso como sala de lectura. Esa comunicación llega un día después de que el director gerente de Centro de Empresas, Bernardo Veira, manifestara a través de las páginas de este diario que desde el Ayuntamiento se encontraban en conversaciones con la Universidad y el Centro de Arte para que las empresas que pretenden instalarse en torno a la "milla del conocimiento" y no disponen de espacios disponibles en el Parque Científico puedan ocupar zonas libres de las dos instituciones anteriores. Los alumnos permanecerán encerrados en las instalaciones de la biblioteca durante el fin de semana "y lo que haga falta", y piden el apoyo del resto de la comunidad universitaria.