El Ayuntamiento de Gijón iniciará mañana martes dos importantes obras que se realizarán de forma paralela en el Paseo de El Muro: la renovación del pavimento de la calzada y la prolongación del carril bici que actualmente llega hasta la altura de la calle Juan Alonso y que con este nuevo proyecto se extenderá hasta la zona de Campo Valdés. Esta segunda actuación obligará, además, a modificar la circulación de vehículos en varias calles.

Hace poco menos de un año el gobierno local dio por finalizadas las obras de la primera fase del carril habilitado para bicicletas en El Muro. "Asturies con Bici" denunció entonces el proyecto asegurando que los carriles no respetaban el ancho de dos metros recomendado por la Dirección General de Tráfico para este tipo de vías. Ahora, la idea es completar la obra para "dar continuidad" a los viales ciclistas costeros de la ciudad. Con el nuevo tramo se unirán, tal y como recalcaba ayer la Alcaldesa Carmen Moriyón, los viales para bicis de Fomento con los de la avenida de Castilla y la zona de El Piles.

El nuevo trazado para ciclistas va a obligar a eliminar un carril de circulación en dirección a Cimadevilla. Cuando acaben las obras se mantendrá por El Muro un único carril para coches que, en la zona de el martillo de Capua, deberán compartir quienes giren a la izquierda -hacia la Plazuela- y quienes quieran seguir de frente hacia Cimadevilla y la calle San Bernardo. El Ayuntamiento asegura que "un ajuste en la regulación semafórica" evitará los atascos en este punto. Un poco más adelante, en la calle Jovellanos, se reducirán las isletas para que se puedan mantener los dos carriles de tráfico rodado que darán la posibilidad al conductor de dirigirse hacia la calle Domínguez Gil y seguir dirección San Bernardo hacia la plaza Mayor y Cimadevilla o de girar hacia la calle Cabrales. Lo que ya no habrá será acceso a Cimadevilla por la calle Cabrales. El proyecto incluye también el asfaltado con un pavimento de color de todo el carril bici.

El Ayuntamiento contaba en un principio con un presupuesto de casi 400.000 euros para este segundo tramo del carril bici y para la nueva pavimentación de la calzada, muy deteriorada con el paso del tiempo. Finalmente el contrato se adjudicó por 241.286 euros.