Hace 15 años Gijón recuperaba la figura del Sereno. En 1999 estos vigilantes nocturnos volvían a "patrullar" las calles de la ciudad con un doble objetivo: conseguir puestos de trabajo para personas en riesgo de exclusión, como parados de larga duración o mujeres maltratadas, y volver a poner en funcionamiento un servicio que había desaparecido en los años 70. Los responsables de esta iniciativa supieron desde un primer momento que el sereno del siglo XXI tenía que reinventarse. Es por esto que, además de aumentar el servicio al cliente, los vigilantes nocturnos de Gijón se han esforzado en los últimos años por mejorar, sobre todo, la atención a quien visita la ciudad en periodos vacacionales como la Semana Santa que acaba de concluir. Sólo durante el año 2013 estos vigilantes nocturnos realizaron 10.367 atenciones a turistas, un 13 por ciento más que en el ejercicio anterior.

Los serenos ofrecen a los visitantes planos de la ciudad patrocinados por el Ayuntamiento de Gijón o les informan de cómo llegar a hoteles, restaurantes o cafeterías. Se trata, aseguran, de que el foráneo tenga también un guía que le ayude durante las noches, cuando las oficinas de información ya han cerrado sus puertas. "La ayuda al turista hace que recibamos muchas felicitaciones todos los años", cuentan los responsables del servicio. La información a visitantes supone ya un 17 por ciento de su total de actividades. Cada día del año se responde a una media de 28 peticiones de información que hacen engordar una estadística en la que ya se contabilizan en total 61.415 actuaciones anuales.

El mayor montante de estas actividades se sigue englobando, a pesar del aumento de las atenciones a personas de fuera de Gijón, dentro del epígrafe "servicios a clientes", una actividad con la que se pretende garantizar la tranquilidad nocturna de quienes financian, a medias con las instituciones públicas, el servicio de Serenos. En total se realizaron 36.205 actuaciones en comercios que, por ejemplo, se habían dejado las puertas abiertas o las persianas mal bajadas.

"La mejora de la calidad siempre ha sido una máxima en la prestación del servicio", añaden desde la empresa. Serenos de Gijón acaba de renovar, por ejemplo, su compromiso con el sistema SICTED, un proyecto de mejora de la calidad en los destinos turísticos promovido por el Instituto de turismo de España y la Federación Española de Municipios y Provincias. Este programa tiene como objetivo la mejora de la experiencia por parte de los turistas. Una iniciativa que se renueva a la vez que se crean nuevos proyectos como la escuela de formación de Serenos que arrancó el pasado año.