Los cuatro delincuentes acusados de perpetrar, en mayo de 2012, un robo de película en la residencia del conde de Güemes, reconocieron ayer los hechos ante la magistrada del juzgado de lo penal número 3 de Gijón y aceptaron una condena de 2,5 años de prisión para cada uno de ellos. Los imputados se llevaron del palacio de Revillagigedo de Deva, gracias a la ayuda de la asistenta del conde, una diadema valorada en más de un millón de euros que aún no ha podido ser localizada, 35.000 euros en efectivo, un reloj y otras antigüedades.

El abogado que representa a los procesados consiguió llegara a un acuerdo con el fiscal antes de que se celebrara el juicio, previsto para las nueve y media de la mañana de ayer. El Ministerio Público señalaba en su escrito de acusación que los cuatro condenados llevaban meses preparando el golpe. Una mujer de origen latino se había puesto en contacto con los tres cabecillas de la banda delictiva a la que se le encargó el asalto semanas antes del suceso. La mujer, a la que ahora se busca, llegó a un acuerdo con los delincuentes: les mostraría el camino hacia las joyas a cambio de parte del botín. Los agentes de la Guardia Civil que en su día llevaron la investigación del caso aseguran que esta delincuente conocía muy bien la zona ya que llevaba varios meses viviendo en el palacio de Revillagigedo propiedad del conde Güemes aprovechando que la asistenta era familiar suya y que el dueño de la vivienda no reside en Gijón de forma habitual. La mujer llegó incluso a convencer a la colaboradora del conde y a su marido para que "abandonaran la casa" durante el robo y "miraran para otro lado". El acuerdo fue inmediato. Los tres cabecillas de la banda criminal se desplazaron hacia Gijón para comprobar los datos que vía telefónica les había comunicado su compinche. Finalmente el día 17 de mayo, de madrugada, entraron en la vivienda después de desactivar los sistemas de alarma y rompiendo una ventana para confundir a los investigadores. Una vez dentro de la propiedad violentaron la caja fuerte y abandonaron la casa. El millonario robo se llevó a cabo en poco menos de media hora, según la Guardia Civil.

La investigación de estos funcionarios no fue sencilla. Las piezas del puzzle no comenzaron a encajar hasta que los agentes se percataron de la presencia en Gijón días antes y después del robo de varios ciudadanos de origen sudamericano con antecedentes por robos en viviendas. Las sospechas aumentaron cuando los funcionarios policiales se dieron cuenta, poco tiempo después, de la relación de amistad que existía entre una familiar de la asistenta del conde Güemes y los miembros de esta banda, que eran expertos en "robos por encargo". A pesar de que las joyas ya habían sido vendidas en el momento de los arrestos, los agentes localizaron los útiles con los que se llevó a cabo el asalto. Se detuvo a dos miembros de esta banda, a la asistenta y a su marido y a una quinta persona implicada con el robo y localizada en Gijón.

El caso aún no se ha podido cerrar del todo. La Guardia Civil cree que la mujer que ayudó a los delincuentes se encuentra actualmente en América del Sur, a donde huyó tras el asalto.

Cronología de los hechos

Preparación del robo

Los miembros de la banda de delincuentes especializados en "robos por encargo" se desplazaron a Gijón días antes del asalto. Una familiar de la asistenta del conde de Güemes les había llamado prometiéndoles un botín millonario a cambio de poder llevarse parte de lo robado.

Madrugada

La mujer llegó a convencer a su familiar, asistenta del conde, para que abandonara la casa durante el asalto y dejara la puerta abierta.

Detenidos

La Guardia Civil detuvo a cinco personas. Todos los acusados ingresaron en prisión provisional como consecuencia del asalto.

Juicio

Cuatro de los imputados se sentaron ayer en el banquillo de los acusados del juzgado de lo penal número 3. El abogado que representa a los delincuentes llegó a un acuerdo con la Fiscalía para rebajar la pena de sus clientes, que, a cambio, reconocieron los hechos. Finalmente cada procesado aceptó dos años y medio de prisión.