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Una casería gijonesa en la Toscana

La artista Virginia López inaugurará mañana en la ciudad italiana de Pistoya una instalación inspirada por Casa Antonino, en Cenero

Virginia López, debajo de la panera de Casa Antonino.

La casería es la construcción más característica de la zona rural asturiana. Virginia López (1975) tiene previsto inaugurar mañana en Pistoya, ciudad italiana de la Toscana, una instalación inspirada por ese típico núcleo de poblamiento del Principado, más concretamente por la casería Casa Antonino, en Trubia, parroquia de Cenero, adquirida el año pasado por la artista gijonesa y en la que ha instalado un centro de experimentación para el estudio del paisaje y distintos encuentros artísticos.

"Espero que podamos tenerlo todo listo para el próximo mes de septiembre", explicó ayer Virginia López. ¿Y cómo surgió la propuesta de esta instalación? Virginia López, que es licenciada en Historia por la Universidad de Oviedo, ha pasado catorce años en Florencia, donde estudió Bellas Artes. Esa conexión italiana le abrió las puertas de Lo Spazio di via dell'ospizio, que es donde inaugurará mañana "Casa Antonino, micro-storia di una caseria asturiana", la instalación que surge de su interés por ese conjunto que forman en las zonas rurales asturianas la casa, el hórreo o la panera, la cuadra, el lagar, el huerto, la pomarada y otras dependencias.

La artista explicó ayer que su instalación incluye libros de artista, fotografías o notas bibliográficas sobre casa Antonino; documentación que ayuda a entender el singular perfil de estas construcciones y su importancia en la vida del Principado: "Significa hablar del paisaje rural asturiano, de los usos, costumbres, ritos, de la economía y de la cultura campesina". Y más: "La casa no es sólo un edificio, es lugar de trabajo, de recolección y de socialización, de vida, nacimientos, matrimonios y funerales".

Virginia López no elude, además, que la casería forma parte de un mundo que está amenazado desde hace años por la creciente industrialización y las concentraciones urbanas: "En la actualidad, la casería se ha transformado prácticamente en segundas viviendas de fin de semana y en algunos casos pervive gracias a la especialización lechera, pero ha perdido en la mayor parte de los casos la diversificación de la producción agrícola que la caracterizaba".

A juicio de la artista, "la pérdida de la dimensión económica de la casería ha generado una pérdida de su dimensión social y cultural". Y de ahí deriva el interés de esta exposición y del trabajo que Virgina López quiere desarrollar a partir de Casa Antonino. Está interesada por ejemplo en recuperar tradiciones festivas de Trubia, como la puya del ramu que se celebraba en julio.

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